Nota del editor: El 3 de diciembre de 2024, a través de un video en su canal de YouTube “Cathopray”, Samuel Bonilla —antes conocido en redes sociales como el “Padre Sam”— informó que el Papa Francisco lo dispensó del estado clerical, tal como él lo solicitó hace poco más de un año. Bonilla, de 35 años, nació en la localidad de Nombre de Dios, en El Salvador, como el menor de siete hermanos. Fue ordenado sacerdote en junio de 2015.
El P. Samuel Bonilla Amaya, sacerdote de origen salvadoreño que ha trabajado en países como Honduras y México; y es conocido en las redes sociales como el “Padre Sam”, anunció que solicitará la dispensa del estado clerical.
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El Padre Sam fue ordenado diácono el 20 de junio de 2015 y recibió la ordenación sacerdotal el 16 de enero de 2016. Es el menor de siete hermanos y fue también colaborador de ACI Prensa y ChurchPop.
En un video publicado en sus redes el 15 de noviembre, el sacerdote de 34 años de edad, señaló: “Después de un muy buen tiempo de reflexión, de acompañamiento espiritual, humano y psicológico, en libertad y conciencia, y en diálogo con las autoridades competentes, he tomado la decisión de solicitar al Santo Padre la dispensa del estado clerical, esto es mi renuncia al ejercicio del sacerdocio ministerial”.
“Esto significa que ya no administraré los sacramentos y seguiré las diligencias canónicas que esto conlleva. Seguiré siendo sacerdote para siempre, pero ya no voy a ejercer mi ministerio sacerdotal. Voy a solicitar la dispensa”, continuó.
El Código de Derecho Canónico establece en el canon 290 que “una vez recibida válidamente, la ordenación sagrada nunca se anula”. Sin embargo, el clérigo puede solicitar la dispensa del estado clerical, que de acuerdo al canon 292 significa que “pierde con él los derechos propios de ese estado, y deja de estar sujeto a las obligaciones del estado clerical”.
El código también establece en el canon 976 que un sacerdote que ha perdido el estado clerical puede confesar y absolver a un penitente en peligro de muerte.
El sacerdote, que en junio cambió el nombre de sus redes sociales de Padre Sam a Cathopray, explicó que esta decisión le ha tomado años. “Ha sido difícil, pero en este momento es una decisión que tomo con mucha paz en mi corazón. Está de más decir que no estoy renunciando a la Iglesia, mucho menos a mi fe católica”.
“Ahora seguiré y serviré al Señor desde otro estado de vida. Al hacer este anuncio me gustaría expresar el profundo agradecimiento que siento con mi madre la Iglesia. Todo lo que soy y tengo se lo debo prácticamente a ella”, continuó el sacerdote.
El Padre Sam agradeció de manera especial al P. Reinaldo Sorto por su acompañamiento; y al Cardenal Oscar Rodríguez Maradiaga, Arzobispo Emérito de Tegucigalpa (Honduras), quien “desde el primer día que lo conocí se convirtió en un padre para mí y me ha mostrado su apoyo de forma incondicional”.
Luego de dar las gracias a los demás obispos y sacerdotes que lo han acompañado, el presbítero precisó que se retira “con un sentimiento de alegría, al reconocer todo el bien que el Señor quiso hacer a través de este siervo frágil. He vivido mi ministerio con mucha alegría e intensidad”.
También pidió perdón “por el daño que pude haber causado”, así como a las personas “que ante esta decisión se sientan tristes o decepcionadas. Es comprensible, pero como ya mencioné es una decisión madurada y acompañada”.
El Padre Sam precisó que no se retira “enojado ni resentido ni con la Iglesia ni con nadie. Tampoco me están obligando a eso. No existe un proceso en mi contra que me orille a ello”.