El Papa Francisco ha autorizado al Dicasterio para las Causas de los Santos promulgar el decreto que reconoce el milagro atribuido a la intercesión de la Beata María Antonia de Paz y Figueroa, conocida como "Mama Antula", nacida Argentina en 1730.
Tras una reunión mantenida en la tarde de este martes 24 de octubre con el Cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, el Papa ha dado luz verde a que sea canonizada, por lo que se convertirá en la primera santa nacida en Argentina.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
En un vídeo dirigido el 4 de marzo de 2023 a la Diócesis de Villa Silípica, el pueblo natal de la Beata María Antonia de Paz y Figueroa, el Santo Padre aseguró que su canonización estaba cerca, ya que se estaban “estudiando” dos milagros.
La Familia Antuliana celebra el saludo de @Pontifex_es a los devotos de Mama Antula en la figura del Padre Ramón Tenti, párroco de Villa Silípica, en el inicio de las celebraciones por la próxima santa argentina. Vía @ArgSantaSede
— Mama Antula Canonización (@beatificaciona1) March 4, 2023
Rezamos por Él a 10 años de su pontificado pic.twitter.com/cycZyIBQ8g
Hasta el momento, el Vaticano no ha comunicado detalles sobre el milagro atribuido a la futura santa que ha sido aprobado por el Pontífice este 24 de octubre.
Mama Antula se suma así a otros tres santos que sirvieron incansablemente por la causa de Cristo en Argentina: San José Gabriel del Rosario Brochero, conocido como el “Cura Brochero” (1840 – 1914); el hermano salesiano San Artémides Zatti (1880 – 1951) y San Héctor Valdivielso Sáez (1910 – 1934), hermano de La Salle asesinado a los 24 años durante la Guerra Civil Española.
Beata Mama Antula
María Antonia de Paz y Figueroa nació en 1730 en Santiago del Estero. Trabajó desde muy joven con los jesuitas colaborando en la organización de ejercicios espirituales. Luego partió a Buenos Aires, donde se dedicó durante 20 años a predicar el mensaje de Cristo.
En 1795 fundó la Santa Casa de Ejercicios Espirituales en Buenos Aires, la que aún cumple su misión bajo el cuidado de la Congregación Hijas del Divino Salvador. Falleció el 7 de marzo de 1799 en esa residencia. Sus restos descansan en la iglesia Nuestra Señora de la Piedad en Buenos Aires.
El milagro que permitió su beatificación fue aprobado el 4 de marzo de 2016. Este consistió en la recuperación inexplicable, en 1904, de la religiosa María Rosa Vanina, de las Hijas del Divino Salvador. La religiosa sufría de una colecistitis aguda con shock séptico, luego de que los médicos pronosticaron una muerte segura.
Gracias a ello, el 26 de agosto de 2016, María Antonia de Paz y Figueroa fue beatificada por el delegado del Papa Francisco y entonces prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el Cardenal Angelo Amato.