El Papa Francisco se reunió el martes con líderes de la organización estadounidense LGBT New Ways Ministry (Ministerio de Nuevos Caminos), que años atrás fue acusada de causar “confusión” en la moral sexual entre los fieles católicos por la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos y por la entonces Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano.
Se desconoce cuál fue el tema de la reunión, pero la organización indicó en un comunicado del 17 de octubre que esta duró 50 minutos, y su controvertida cofundadora, la Hermana de Loretto Jeannine Gramick, agradeció al Santo Padre por “su apertura para bendecir uniones del mismo sexo, así como por su oposición a la criminalización de las personas LGBTQ+ en la sociedad civil”.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Ninguna de las palabras del Santo Padre en la reunión fue compartida en el comunicado de la organización. CNA —agencia en inglés de EWTN News— consultó a la organización sobre el contenido de la reunión, pero no recibió respuesta antes de la publicación.
New Ways Ministry fue fundado en 1977 en la Arquidiócesis de Washington (Estados Unidos) por Gramick y el P. Robert Nugent, quienes fueron "permanentemente prohibidos de cualquier trabajo pastoral relacionado con personas homosexuales" después de una investigación sobre su labor, según lo dictaminó la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano en una notificación de 1999.
Sin autoridad para bendecir
Las palabras de agradecimiento de Gramick al Papa por su supuesta “apertura” a las bendiciones de uniones del mismo sexo se refieren a una respuesta que el Santo Padre dio a cinco cardenales en julio de este año, luego de que solicitaran respuestas a un conjunto de preguntas conocido como dubia.
Varios medios de comunicación informaron que el Papa Francisco estaba “abierto” a dar bendiciones a parejas del mismo sexo después de la publicación de la respuesta en octubre, pero se precipitaron demasiado, ya que el Santo Padre ya afirmó en 2021 que la Iglesia no tiene autoridad para hacerlo.
Además, teólogos que hablaron con el National Catholic Register la semana pasada afirmaron que el enfoque del Papa no estaba en las uniones del mismo sexo, sino en las personas con atracción al mismo sexo que puedan estar en alguna forma de relación del mismo sexo.
Investigación del Vaticano
Gramick y Nugent comenzaron a realizar talleres en Washington D.C., para “trabajadores pastorales católicos y otras personas interesadas en temas de homosexuales y lesbianas", según el sitio web de la organización. Pero también coescribieron y editaron libros juntos, los cuales fueron el objeto de la investigación del Vaticano.
La investigación del Vaticano, realizada en 1998, se centró en gran medida en su libro Building Bridges: Gay and Lesbian Reality and the Catholic Church (Construyendo puentes: Realidad gay y lesbiana y la Iglesia Católica”, que “resumía sus actividades y pensamientos”, según la notificación del dicasterio del Vaticano.
La Santa Sede concluyó finalmente que había “graves deficiencias en sus escritos y actividades pastorales, que eran incompatibles con la plenitud de la moral cristiana”.
La entonces Congregación para la Doctrina de la Fe les hizo preguntas sobre sus posiciones en cuanto a la moral sexual.
En sus respuestas, “la Hermana Gramick y el Padre Nugent demostraron una comprensión conceptual clara de la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad, pero se abstuvieron de profesar adhesión a esa enseñanza”, señala la notificación del Vaticano.
Ese documento, firmado por el entonces Cardenal Joseph Ratzinger, el futuro Papa Benedicto XVI, indicaba que sus posiciones “sobre la maldad intrínseca de los actos homosexuales y el desorden objetivo de la inclinación homosexual son doctrinalmente inaceptables, ya que no transmiten fielmente la enseñanza clara y constante de la Iglesia Católica en esta área”.
En 2010, bajo el liderazgo del fallecido Cardenal Francis George, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos emitió una declaración enfatizando que New Ways Ministry “no tiene aprobación ni reconocimiento de la Iglesia Católica y que no pueden hablar en nombre de los fieles católicos en Estados Unidos”.
Correspondencia
La reunión del martes se produce luego de varios años de correspondencia entre Gramick, la organización y el Santo Padre, según el comunicado de New Ways Ministry.
En abril de 2021, el director ejecutivo de la organización, Francis DeBernardo, escribió al Papa Francisco explicando la misión de la organización, añade el comunicado.
El 3 de mayo de 2021, el Papa Francisco respondió a una carta de DeBernardo y dijo que había leído la misiva, lo que le ayudó a comprender mejor la historia de la organización, según el National Catholic Reporter.
“Me ayudó mucho conocer la historia completa que me cuentas”, escribió el Santo Padre. “A veces recibimos información parcial sobre personas y organizaciones, y esto no ayuda. Tu carta, al narrar con objetividad su historia, me da luz para entender mejor ciertas situaciones”.
En una carta de junio de 2021 a DeBernardo, el Papa le agradeció por su "corazón, abierto a tu prójimo” y se refirió a Gramick diciendo que “sé cuánto ha sufrido”, según el National Catholic Reporter.
“Ella es una valiente mujer que toma sus decisiones en oración”, dice la carta.
La correspondencia ha continuado desde entonces, “siempre recibiendo notas cordiales y afirmativas en respuesta”, indica el comunicado de la organización.
"Esta reunión es notable porque refleja la creciente aceptación de autoridades católicas hacia los asuntos y el ministerio LGBTQ+”, continúa el comunicado.
New Ways Ministry no solo ha conseguido una audiencia con el Papa Francisco, sino también con Nathalie Becquart, Hermana Misionera Xavière y subsecretaria general del Sínodo, quien ofreció una conferencia a la organización en 2022, titulada “Sinodalidad: Un Camino de Reconciliación”.
La decisión de ofrecer la “Conferencia Conmemorativa del Padre Robert Nugent”, en honor al sacerdote fallecido en 2014, fue criticada por el Cardenal Raymond Burke, prefecto emérito de la Signatura Apostólica, en declaraciones al National Catholic Register.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.