Los informes sobre las deliberaciones privadas de los participantes en el Sínodo de la Sinodalidad son accesibles a través de un servidor que no es seguro, según informó el viernes el medio de noticias The Pillar.
Los registros, que según The Pillar están a disposición de cualquiera que tenga la dirección web correcta sin necesidad de contraseña, incluyen las listas de los grupos de trabajo del Sínodo y las relaciones (informes) que presentaron al término de la primera ronda de debates.
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The Pillar indicó que no publicará las asignaciones de los grupos ni los informes "siguiendo la petición del Papa Francisco de 'cierta restricción' en la cobertura periodística del proceso sinodal".
Pero su informe, publicado este viernes, resulta algo vergonzoso para el Vaticano y es una extraordinaria ruptura del muro de secreto que los organizadores del Sínodo han tratado de establecer desde que la asamblea, de un mes de duración, se puso en marcha el 4 de octubre. Entre otras cuestiones, el reporte plantea la pregunta de quién más habrá estado espiando las deliberaciones supuestamente confidenciales del Sínodo durante todo este tiempo.
Además, la disponibilidad de las asignaciones de los grupos de trabajo del Sínodo pone en duda la decisión de los organizadores de no facilitar la información a los medios de comunicación. Paolo Ruffini, presidente de la comisión de información del Sínodo, ha declarado anteriormente que no conocía las asignaciones y que no las obtendría ni compartiría con los miembros de la prensa.
Las asignaciones han sido fuente de controversia porque, rompiendo con lo que ha venido dándose, sólo a determinados miembros del Sínodo se les ha asignado la tarea de centrarse en ciertos temas. Ello ha suscitado la preocupación de que los informes de los grupos puedan no reflejar las opiniones de toda la asamblea, especialmente en temas controvertidos como el ministerio pastoral para personas atraídas por el mismo sexo y que se identifican como transgénero, así como la posibilidad de abrir el diaconado a las mujeres.
Las relaciones de los grupos constituirán una base importante para un documento de síntesis de la asamblea, que a su vez proporcionará el punto de partida para la segunda y última sesión del Sínodo en octubre de 2024.
Además, la descripción general que hace The Pillar de los informes de los grupos o mesas de trabajo plantea dudas sobre la afirmación que vienen haciendo desde hace tiempo los líderes del Sínodo de que esta sesión del 4 al 29 de octubre no se centraría en la doctrina de la Iglesia, sino en cómo la Iglesia puede incluir mejor a sus miembros.
Como informó The Pillar, "si bien algunos grupos de trabajo hicieron hincapié en la fidelidad doctrinal, al menos un informe expresó un llamamiento a la Iglesia para que reconsidere la doctrina sobre la moral sexual".
El hallazgo se alinea con las recientes declaraciones de Ruffini en una rueda de prensa, en el sentido de que algunos miembros del Sínodo han pedido "un mayor discernimiento sobre la enseñanza de la Iglesia en materia de sexualidad", mientras que otros han dicho que "no hay necesidad" de ello.
En términos más generales, The Pillar señaló que los informes de los grupos de trabajo reflejaban las "actualizaciones del Sínodo proporcionadas por la Oficina de Prensa del Vaticano".
The Pillar precisó que accedió al servidor 'no seguro' el 12 de octubre, después de ser alertado por una fuente no revelada, y "notificó inmediatamente al Dicasterio para la Comunicación del Vaticano".
Los representantes del Vaticano no han respondido a la solicitud de comentarios de CNA -agencia en inglés de EWTN- y no se ha confirmado que el acceso al servidor haya sido restringido.
La aparente falta de seguridad de las comunicaciones parece contradecir el pedido del Papa Francisco de mantener la confidencialidad de los procedimientos del Sínodo. Los miembros no están autorizados a revelar el contenido de los debates dentro del Aula Pablo VI, y los informes de las mesas de trabajo y los discursos pronunciados en la asamblea no se hacen públicos. El Santo Padre ha dicho que estas restricciones a la transparencia son necesarias para permitir a los miembros del Sínodo "expresarse libremente."
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA