En una celebración que tendrá lugar el miércoles 11 de octubre en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires (Argentina), el Cardenal Luis Dri, fraile capuchino de 96 años, recibirá la birreta, el anillo y el título cardenalicio.
El Cardenal Dri explicó a EWTN Noticias que debido a su edad y a su estado general de salud —está en silla de ruedas—, no viajó a Roma para participar en el Consistorio del 30 de septiembre, en el que el Papa Francisco creó a 21 nuevos cardenales.
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"Estoy bien, perfectamente bien, mi salud, mi cabeza, mi estómago están bien; simplemente que estoy en sillón de ruedas, no puedo caminar", aclaró.
Por ese motivo, los atributos cardenalicios le serán entregados durante una Misa presidida por el Arzobispo de Buenos Aires, Mons. Jorge García Cuerva, con la participación del Nuncio Apostólico en Argentina, Mons. Miroslaw Adamczyk.
La ceremonia tendrá lugar a partir de las 17:30 horas. Con gran alegría, la familia de los Frailes Menores Capuchinos invitó a la comunidad a participar en este acontecimiento.
Asimismo, el Arzobispo y los Obispos Auxiliares de Buenos Aires convocaron a la celebración eucarística en la que un miembro del clero local recibirá las insignias que simbolizan su inscripción en el Colegio de Cardenales.
Fray Dri reconoció que no tiene claro lo que pasará el miércoles, "porque nunca fui cardenal", bromeó.
Respecto de su nombramiento, lo considera "una atención del Papa, una delicadeza" que simboliza la confianza del Pontífice. "Yo no soy hombre de ciencia, soy un fraile menor, un fraile capuchino, pero el Papa quiso que un fraile 'del pueblo' sea cardenal, como testimonio del sacramento de la Reconciliación", aseguró.
En cuanto a la importancia de este sacramento, precisó: "No hay que dejarlo, sino todo lo contrario: intensificar este sacramento de la Misericordia".
"Para mí significa eso, por eso procuraré continuar en la misma situación: bendiciendo, perdonando, ayudando, acompañando, escuchando sobre todo", aseguró.
El Cardenal Luis Dri nació en 1927 en Federación, provincia de Entre Ríos (Argentina). Desde pequeño se desempeñó en tareas rurales para ayudar a su familia.
Desde hace muchos años es confesor en la parroquia y Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Nueva Pompeya, en la zona sur de la capital, casi en el límite con la provincia de Buenos Aires.
Fue confesor del Cardenal Jorge Bergoglio —hoy Papa Francisco— en sus tiempos como Arzobispo de Buenos Aires. Actualmente, y pese a su avanzada edad, continúa dedicándole muchas horas a escuchar confesiones.
Noticia actualizada el 7 de octubre con el aporte de Matías Bocca, corresponsal de EWTN Noticias.