“Os pido que intensifiquéis vuestra oración para que todos los participantes de la Asamblea General del Sínodo estemos abiertos a las inspiraciones del Espíritu Santo, para que sea Él quien nos guíe en nuestro trabajo”.
Con estas palabras, el Arzobispo de Barcelona, Cardenal Juan José Omella, ha pedido a los fieles en su última carta dominical que sostengan invocando al Espíritu Santo a los participantes del Sínodo de la Sinodalidad que comienza el próximo miércoles.
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El Cardenal recuerda que, en la historia de la Iglesia, en especial “en momentos intensos de trabajo y de discernimiento, en concilios, sínodos, asambleas eclesiales”, los fieles han hecho suya una invocación atribuida a San Isidoro de Sevilla: “Estamos antes ti, Espíritu Santo”.
Así considera que se ha realizado, a lo largo de la fase previa del Sínodo de la Sinodalidad, en numerosos grupos de todo el mundo: “Partiendo de la experiencia de hacer camino juntos y escuchándose con respeto unos a otros, han querido predisponer a la escucha del verdadero protagonista, el Espíritu Santo”.
En su misiva, el Cardenal considera además que “crecer en sinodalidad sigue siendo un reto también para todos, en la medida en que potencia la comunión entre nosotros y con Dios, lo que nos permite ser evangelizadores”.
A punto de comenzar la primera sesión del Sínodo de la Sinodalidad, el Purpurado explica: “Queremos seguir con atención lo que nos diga el Espíritu haciendo resonar en el corazón” las palabras dirigidas a las comunidades de Asia recogidas en el Apocalipsis: “El que tenga oídos que oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias”.