La Diócesis de Málaga (España) ha dado un nuevo paso en el caso del sacerdote diocesano detenido el pasado lunes, acusado de ser el presunto autor de varios delitos de abuso contra mujeres.
A través de un comunicado difundido este viernes 29 de septiembre, la diócesis que gobierna pastoralmente Mons. Jesús Catalá ha informado de que “ha iniciado el procedimiento para la expulsión del estado clerical de dicho sacerdote, según la normativa canónica”.
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Además, en el plano de la justicia secular, y “tras un estudio en el que se ha valorado el grave perjuicio causado, ha decidido personarse en la causa abierta como perjudicada, en calidad de Acusación Particular”.
Esta decisión se ha tomado “con el propósito de permanecer al lado de las víctimas y de continuar poniendo todos los medios a su alcance" para esclarecer los hechos.
El Obispado manifiesta asimismo que espera “que estas acciones contribuyan a la investigación y al bien de los fieles cristianos, al tiempo que se esclarece la verdad”.
La Diócesis de Málaga también reitera, como ya ha hecho en ocasiones anteriores a lo largo de la semana, “su dolor por el daño cometido y su cercanía a las víctimas, su condena más profunda y contundente a toda forma de abuso a la mujer y su disposición a seguir colaborando con la Justicia”.
Por último, manifiesta su compromiso de rezar a Dios “por las víctimas, a quienes continuamos manifestando nuestra cercanía y apoyo”.
El pasado martes, la Diócesis ya tomó la decisión de retirar “las licencias ministeriales para que no ejerza el sacerdocio” al presbítero.
Según informó la Policía Nacional, la investigación se inició cuando una mujer, identificada como “la actual pareja del arrestado”, descubrió en el domicilio que compartían en Melilla material informático con vídeos que presuntamente le incriminaban.
El dispositivo electrónico entregado "contenía fotografías y vídeos donde aparecían varias mujeres semidesnudas, dormidas o bajo los efectos de algún sedante y a las que un hombre les realizaba todo tipo de prácticas sexuales”.
Los hechos que se investigan habrían tenido lugar en diferentes localidades del sur de España a lo largo de los últimos años.