La Universidad Católica del Táchira (UCAT), en Venezuela, suscribió un convenio de cooperación con el Centro de Investigación y Protección al Menor de Latinoamérica (CEPROME) con el objetivo de prevenir la violencia y los abusos, especialmente en ambientes eclesiales.
El P. Jean Carlos Medina, coordinador de la Facultad de Ciencias de la Religión de la UCAT, informó que el convenio se firmó en Roma. En el acto estuvieron presentes el P. Javier Yonekura Shimizu, rector de la universidad; el P. Daniel Portillo, presidente del CEPROME Latinoamérica, y Mons. Mario Moronta, Obispo de San Cristóbal y Gran Canciller de la UCAT.
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El P. Medina afirmó que la iniciativa “surgió a partir de la celebración del evento convocado por la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), en Caracas, donde se intercambiaron las experiencias de trabajo sobre la difusión del protocolo de prevención y actuación ante posibles casos de abuso sexual a niños, adolescentes y personas vulnerables”.
El acuerdo prevé la conformación de “una red de trabajo conjunto” para fortalecer a ambas organizaciones en sus respectivas “instancias interdisciplinarias” y lograr “prevenir abusos y violencia en ambientes eclesiales”, según informó la CEV en su página web.
Por su parte, el P. Medina señaló que, durante las jornadas de capacitación en las vicarías de la Diócesis de San Cristóbal, sede de la universidad, “se observó la necesidad de continuar despertando la conciencia y la responsabilidad que implica la realidad de los abusos y la violencia”. Por esto, resaltó la importancia de “promover ambientes seguros” en espacios eclesiales y educativos.
Con el convenio en vigor se implementarán “cursos de formación en materia de abusos sexuales a menores” dirigidos a los formadores de la Diócesis y se publicarán investigaciones y otros materiales orientados “a consolidar la labor educativa y de acompañamiento de la Iglesia, en atención a los lineamientos del Magisterio de garantizar espacios seguros”.
El acuerdo contempla igualmente “hacer foco en el acompañamiento adecuado a quienes hayan sido víctimas de situaciones de violencia y abusos como forma de garantizar una acción ajustada al Derecho Secular y Canónico”, indicó el P. Medina.
Finalmente, la CEV explicó que el convenio “seguirá fortaleciendo” a los miembros de la Diócesis de San Cristóbal, y subrayó la importancia de “generar espacios seguros” para garantizar “el respeto y cuidado de la dignidad humana”