La directora general de las Consagradas del movimiento Regnum Christi, Nancy Nohrden, expresó su cercanía a las integrantes de la comunidad en Chile y Argentina, ante una carta publicada este martes por un grupo de exconsagradas.
En el mensaje, dado a conocer por el portal La Tercera, cerca de 30 antiguas miembros del movimiento respaldan una demanda civil presentada en junio en contra de los Legionarios de Cristo.
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La denunciante es una mujer que asegura haber sido víctima de abusos de poder, de conciencia y sexuales entre 2008 y 2010, mientras formaba parte del Centro de Formación de las Consagradas en Chile.
Las exconsagradas consideran “verosímil” el contexto presentado en la denuncia, y con su carta buscan “aportar información” al respecto.
En primer lugar, aseguran que mientras permanecieron en el movimiento fueron “sometidas a un ambiente en el que el abuso de poder y conciencia eran lo común, y en donde las agresiones sexuales que se describen en la demanda, sí se pudieron haber dado”.
Al referirse al fundador del movimiento, Marcial Maciel, lo definen como “un líder venerado e incuestionable”. Las consagradas “debían ceder ‘el propio juicio en favor de ellos (autoridades y superiores), como holocausto agradable a Dios’”, afirman, de acuerdo con los estatutos.
Por otro lado, pesaba sobre ellas un “control exigente del uso del tiempo, monitoreado al detalle y de forma rigurosa por parte de los superiores”, precisa la carta, como también la prohibición “de cuestionar cualquier mandato o requerimiento” de ellos.
Además, tener amistades se consideraba “ser infiel a Dios”, manteniéndolas “aisladas unas de otras”, como también de los medios de comunicación, y privadas de sus documentos personales.
Con esta publicación, las ex integrantes afirman buscar "que la verdad —y sólo la verdad— salga a la luz”.
La respuesta de la directora
Ante estas declaraciones, Nancy Nohrden expresó su cercanía y oraciones en una carta enviada este miércoles 6 de septiembre a las consagradas chilenas y las que trabajen en Chile-Argentina.
En primer lugar, destacó “el compromiso genuino y sincero por la búsqueda de la verdad" en esta "dolorosa situación”.
Asimismo, hizo referencia a una reflexión que data de su Asamblea General de 2020, en la que constataron “aspectos del ejercicio de la autoridad y la obediencia que se practicaban en el pasado”.
En ese sentido, llamó a “contrastar lo vivido con el presente y tomar conciencia de los pasos de renovación y maduración en nuestro estilo de vida consagrada y en el ejercicio de la autoridad y obediencia que hemos dado hasta ahora, con la gracia de Dios”.
Nohrden aclaró que “pedir perdón no es desacreditar los pasos de purificación y crecimiento realizados en los últimos años, ni la belleza de una vida consagrada a Dios y al servicio de nuestros hermanos”.
La superior consideró que las experiencias de la historia, que en algunos casos han dejado “huellas de dolor y de desconfianza” pueden ayudar “en el camino de renovación y aprendizaje personal e institucional”.
Por otro lado, reconoció “con dolor” que varios aspectos de la cultura interna, “reflejo de la doble vida que llevó el fundador", generaron un sistema "salpicado de criterios y praxis de vida antievangélicos o al margen de las disposiciones eclesiales”.
Esto, admitió, "causó daños y heridas" a consagradas y miembros de centros estudiantiles.
Sin embargo, expresó gratitud al ver el camino que han “recorrido en los últimos años, de creciente libertad y responsabilidad personal en la vivencia” de su vocación.
“Todavía tenemos que seguir adelante en esta renovación y continua conversión a los criterios del Evangelio”, aseguró, animando a asumir juntas ese compromiso, “desde la perspectiva del Reino a la que Cristo nos invita”.
Finalmente, convocó a unirse en oración para pedir "luz y fortaleza" en el acompañamiento de los hermanos "con profundo respeto, paciencia y caridad".
La demanda
Según explicaron los Legionarios de Cristo, "en noviembre de 2019 se presentó esta misma denuncia ante la Congregación —hoy Dicasterio— para la Doctrina de la Fe de la Santa Sede (CDF) que se refería a varios sacerdotes legionarios de Cristo".
La Congregación, detallaron, había encargado una investigación previa, que duró nueve meses, y en mayo de 2021 determinó que "no reunía los elementos suficientes para dar credibilidad a la denuncia".
La Fundación para la Confianza, que representa a la demandante, afirmó que la denuncia presentada en 2019 abrió el camino "a dos procesos de investigación previa".
Uno de ellos estuvo instruido por consagradas del propio movimiento Regnum Christi, y otro por la Congregación para la Doctrina de la Fe, en Roma.
La fundación informó que la primera de las investigaciones había determinado "que los hechos denunciados eran verosímiles y que además existían indicios de la participación de sacerdotes legionarios".
Además, aseguró que en aquel entonces "la Directora General del Regnum Christi se comunicó con nuestra representada para pedirle perdón, reconociendo la credibilidad de la denuncia y ofreciéndole diversas medidas de reparación".
Sin embargo, en comunicación con ACI Prensa, las Consagradas aclararon que "la directora general, en su primera carta a la denunciante, no reconoció que ya se había verificado la credibilidad de la denuncia".
Lo que reconoció, precisaron, fueron "elementos de credibilidad que se deberían examinar en una investigación ulterior y las deficiencias que existían en relación con la vivencia de la autoridad y obediencia en nuestras instituciones en esos años y lo que a ella le podría haber afectado".
En un comunicado con fecha 26 de junio, el Regnum Christi indicó que al analizar la investigación del canonista externo que estuvo a cargo de la misma "se consideró que podría haber verosimilitud" en algunos elementos.
Las Consagradas del Regnum Christi precisaron a ACI Prensa que "se concluyó que pudiese haber algunos elementos de verosimilitud en el relato, pero para poder constatarlos se requería necesariamente que la denunciante levantara la reserva de su identidad y de su relato. Con ello, se podría realizar una ulterior investigación que llegara a conclusiones firmes y así verificar la verosimilitud de los hechos denunciados".
Asimismo, aclararon que "eventuales actuaciones de sacerdotes legionarios no fueron objeto de la investigación encargada por las consagradas y ellas, por tanto, no se pronunciaron al respecto".
Asimismo, el movimiento señaló en su comunicado que tras el informe emitido en 2021 por el Vaticano, la directora general “dio por concluido el caso" al constatar que "no existen indicios que den suficiente sustento a la denuncia".
Dicho resultado, afirmó, le fue comunicado a la persona que había presentado la denuncia.
Actualización 12 de septiembre: Se han agregado declaraciones a ACI Prensa de las Consagradas del Regnum Christi.