El Presidente de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB), Mons. Aurelio Pesoa Ribera, reflexionó este domingo sobre la importancia del diálogo y la búsqueda de paz en el país, y advirtió sobre el riesgo de caer en la violencia política.
En su homilía de la Misa dominical, el también Obispo del Vicariato Apostólico del Beni cuestionó: “¿Amamos esta patria tan lastimada por sus propios hijos?”.
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Al respecto, describió: “Asistimos a diario al espectáculo de los insultos, amenazas y descalificaciones de una y otra postura política e ideológica, corriendo el peligro de caer en la violencia, que nunca será la solución”.
Mons. Pesoa recordó que en Bolivia “el encuentro entre ciudadanos para conseguir el bien de todos pasa por el diálogo y la búsqueda de la paz”.
Sin embargo, advirtió que por estos días ese diálogo y la paz “se van alejando cada vez más. Cada grupo busca hacer valer sus derechos con amenazas y actitudes de intolerancia”.
“Pareciera que no logramos superar nuestras diferencias”, lamentó.
Refiriéndose al Evangelio dominical, llamó a los fieles a recordar la profesión de fe de Pedro: “Él es portador de la promesa después de la Resurrección del Maestro”, subrayó.
En ese sentido, animó a tener presente que la única Iglesia fundada por Jesucristo es la que fundó sobre la roca de la fe de Pedro, a quien le encomendó su cuidado y protección.
Respecto de la situación del país, aunque reconoció que resulta “trágica”, recordó que “todo depende de Él”.
“Los seres humanos en todos los tiempos podemos pensar que todo está en manos nuestras, que decidimos todo, que podemos todo, pero no es así”, aclaró.
“Los destinos del mundo y de los pueblos, también de Bolivia, están en manos de Dios y en servir a Cristo en los hermanos”, concluyó.