Noticias del 11-12-01 El Papa publica mensaje de paz, justicia y perdón en aniversario de ataques a EE.UU. VATICANO, 11 Dic. 01 (ACI).- En la emblemática fecha del 11 de diciembre, cuando se conmemoran los tres meses de los atentados terroristas contra Estados Unidos, la Santa Sede dio a conocer el Mensaje del Papa Juan Pablo II para la XXXIV Jornada Mundial de la Paz que se celebrará el 1 de enero de 2002. El mensaje firmado y fechado el día 8 de diciembre, Solemnidad de la Inmaculada Concepción, es un documento histórico, distinto a los anteriores tanto por el tono personal como por la referencia a un hecho específico –los atentados del 11 de setiembre– como punto de partida de las reflexiones. Frente al miedo, la esperanza En efecto, el documento pontificio comienza señalando que la Jornada Mundial de la Paz "se celebra con el trasfondo de los dramáticos acontecimientos del pasado 11 de septiembre". "Aquel día –agrega el Papa– se cometió un crimen de terrible gravedad: en pocos minutos, millares de personas inocentes, de diverso origen étnico, fueron horrendamente asesinados. Desde entonces, todo el mundo ha tomado conciencia con nueva intensidad de la vulnerabilidad personal y ha comenzado a mirar el futuro con un sentimiento profundo de miedo, hasta ahora desconocido". El Papa señala que ante estos estados de ánimo, "la Iglesia desea dar testimonio de su esperanza, fundada en la convicción de que el mal, el ‘mysterium iniquitatis’, no tiene la última palabra en los avatares humanos". "La esperanza que sostiene a la Iglesia al comenzar el año 2002 es que el mundo, donde el poder del mal parece predominar todavía, se transforme realmente, con la gracia de Dios, en un mundo en el que puedan colmarse las aspiraciones más nobles del corazón humano; un mundo en el que prevalezca la verdadera paz", agrega. Un testimonio personal En el segundo acápite del documento, el Papa revela que la tragedia del 11 de setiembre, "me ha impulsado a continuar una reflexión que brota a menudo de lo más hondo de mi corazón, al rememorar acontecimientos históricos que han marcado mi vida, especialmente en los años de mi juventud". "Los indecibles sufrimientos de los pueblos y de las personas, entre ellas no pocos amigos y conocidos míos, causados por los totalitarismos nazi y comunista, siempre me han interpelado íntimamente y animado mi oración". En un tono íntimo, el Pontífice comparte con el mundo una pregunta acuciante: "Muchas veces me he detenido a pensar en esta pregunta: ¿Cuál es el camino que conduce al pleno restablecimiento del orden moral y social, violado tan bárbaramente?" "Los pilares de la paz verdadera son la justicia y esa forma particular del amor que es el perdón", dice el Papa; pero sigue preguntando con profuda agudeza moral: ¿Cómo se puede hablar, en las circunstancias actuales, de justicia y, al mismo tiempo, de perdón como fuentes y condiciones de la paz?" La respuesta Y el Santo Padre contesta así a estas interrogantes: "Mi respuesta es que se puede y se debe hablar de ello a pesar de la dificultad que comporta". "Pero el perdón se opone al rencor y a la venganza, no a la justicia. En realidad, la verdadera paz es ‘obra de la Justicia’". "La verdadera paz, pues, es fruto de la justicia, virtud moral y garantía legal que vela sobre el pleno respeto de derechos y deberes, y sobre la distribución ecuánime de beneficios y cargas. Pero, puesto que la justicia humana es siempre frágil e imperfecta, expuesta a las limitaciones y a los egoísmos personales y de grupo, debe ejercerse y en cierto modo completarse con el perdón, que cura las heridas y restablece en profundidad las relaciones humanas truncadas", explica el Papa. "Esto vale –agrega- tanto para las tensiones que afectan a los individuos, como para las de alcance más general, e incluso internacional. El perdón en modo alguno se contrapone a la justicia, porque no consiste en inhibirse ante las legítimas exigencias de reparación del orden violado. El perdón tiende más bien a esa plenitud de la justicia". Por eso, reflexiona Juan Pablo II, para la recuperación de la paz, "son esenciales ambos, la justicia y el perdón". "Estas son las dos dimensiones de la paz que deseo analizar en este mensaje". El fenómeno del terrorismo… Al abordar el tema del terrorismo, el Papa señala que es la paz fundada sobre la justicia y sobre el perdón la que es atacada actualmente por el terrorismo internacional. "En estos últimos años –observa–, especialmente después de la guerra fría, el terrorismo se ha transformado en una sofisticada red de connivencias políticas, técnicas y económicas, que supera los confines nacionales y se expande hasta abarcar todo el mundo". "Empleando sus mismos secuaces como arma arrojadiza contra personas inermes y desprevenidas, estas organizaciones terroristas muestran de modo sobrecogedor el instinto de muerte que las mueve. El terrorismo nace del odio y engendra aislamiento, desconfianza y exclusión". El terrorismo explica el Papa se basa "en el desprecio de la vida del hombre". Precisamente por eso, "no sólo comete crímenes intolerables, sino que en sí mismo, en cuanto recurso al terror como estrategia política y económica, es un auténtico crimen contra la humanidad". …y la legítima defensa Por este motivo, el Santo Padre reconoce que existe un derecho "a defenderse del terrorismo". "Es un derecho que, como cualquier otro, debe atenerse a reglas morales y jurídicas, tanto en la elección de los objetivos como de los medios". "La identificación de los culpables –agrega– ha de ser probada debidamente, porque la responsabilidad penal es siempre personal y, por tanto, no puede extenderse a las naciones, a las etnias o a las religiones a las que pertenecen los terroristas". "La colaboración internacional en la lucha contra la actividad terrorista debe comportar también un compromiso especial en el ámbito político, diplomático y económico, con el fin de solucionar con valentía y determinación las eventuales situaciones de opresión y marginación que pudieran estar en el origen de los planes terroristas", señala también el Papa. Las injusticias no son excusa El Papa señala claramente un criterio moral fundamental ignorado por algunos analistas, incluso cristianos: "es preciso afirmar con claridad que las injusticias existentes en el mundo nunca pueden usarse como pretexto para justificar los atentados terroristas". Además, aclara firmemente que "quien mata con atentados terroristas cultiva sentimientos de desprecio hacia la humanidad, manifestando desesperación ante la vida y el futuro; desde esta perspectiva, se puede odiar y destruir todo. El terrorista piensa que la verdad en la que cree o el sufrimiento padecido son tan absolutos que lo legitiman a reaccionar destruyendo incluso vidas humanas inocentes". "A veces, el terrorismo es hijo de un fundamentalismo fanático, que nace de la convicción de poder imponer a todos su propia visión de la verdad"; dice Juan Pablo II, cuando señala que "pretender imponer a otros con la violencia lo que se considera como la verdad, significa violar la dignidad del ser humano y, en definitiva, ultrajar a Dios, del cual es imagen". Por eso, "el fanatismo fundamentalista es una actitud radicalmente contraria a la fe en Dios", dice el Santo Padre; y agrega que "si nos fijamos bien, el terrorismo no sólo instrumentaliza al hombre, sino también a Dios, haciendo de él un ídolo, del cual se sirve para sus propios objetivos". Por esta razón, "ningún responsable de las religiones puede ser indulgente con el terrorismo y, menos aún, predicarlo. Es una profanación de la religión proclamarse terroristas en nombre de Dios, hacer en su nombre violencia al hombre". Necesidad del perdón Este capítulo lo inicia el Papa Juan Pablo II con dos preguntas cruciales:
"En realidad –responde el Pontífice–, el perdón es ante todo una decisión personal, una opción del corazón que va contra el instinto espontáneo de devolver mal por mal. Dicha opción tiene su punto de referencia en el amor de Dios, que nos acoge a pesar de nuestro pecado". "Así pues, el perdón tiene una raíz y una dimensión divinas. No obstante, esto no excluye que su valor pueda entenderse también a la luz de consideraciones basadas en razones humanas". Así, el Pontífice explica las razones humanas para comprender la importancia del perdón: "Todo ser humano abriga en sí la esperanza de poder reemprender un camino de vida y no quedar para siempre prisionero de sus propios errores y de sus propias culpas". "En cuanto acto humano, el perdón es ante todo una iniciativa de cada individuo respecto a sus semejantes. La persona, sin embargo, tiene una dimensión esencialmente social". "Consecuencia de ello –continúa el Papa- es que el perdón es necesario también en el ámbito social", ya que "la capacidad de perdón es básica en cualquier proyecto de una sociedad futura más justa y solidaria". El poder de perdonar "Por el contrario –dice el Pontífice–, la falta de perdón, especialmente cuando favorece la prosecución de conflictos, tiene enormes costes para el desarrollo de los pueblos. Los recursos se emplean para mantener la carrera de armamentos, los gastos de las guerras, las consecuencias de las extorsiones económicas. De este modo, llegan a faltar las disponibilidades financieras necesarias para promover desarrollo, paz, justicia". El Santo Padre reconoce que el perdón como propuesta social "es un mensaje en cierto modo paradójico"; porque comporta siempre a corto plazo "una aparente pérdida, mientras que, a la larga, asegura un provecho real". "La violencia es exactamente lo opuesto: opta por un beneficio sin demora, pero, a largo plazo, produce perjuicios reales y permanentes". "El perdón podría parecer una debilidad", advierte el Papa; pero destaca que en realidad, "tanto para concederlo como para aceptarlo, hace falta una gran fuerza espiritual y una valentía moral a toda prueba". "El ministerio que llevo a cabo al servicio del Evangelio me hace sentir profundamente el deber, y a la vez me da la fuerza, de insistir sobre la necesidad del perdón", agrega el Papa. "Lo hago también hoy, sostenido por la esperanza de poder suscitar una reflexión serena y madura, de cara a una renovación general, tanto en los corazones de las personas como en las relaciones entre los pueblos de la tierra". El perdón en Tierra Santa Meditando sobre el tema del perdón, dice el Santo Padre, "habría que recordar algunas situaciones trágicas de conflicto, que desde hace demasiado tiempo fomentan odios profundos y lacerantes, con la consiguiente espiral incontenible de tragedias personales y colectivas". "Me refiero, en particular, a cuanto ocurre en Tierra Santa, lugar bendito y sagrado del encuentro de Dios con los hombres, lugar de la vida, muerte y resurrección de Jesús, el Príncipe de la paz". Juan Pablo reconoce que "la delicada situación internacional invita a subrayar con renovada fuerza la urgencia de una solución del conflicto árabe-israelí, que dura ya más de cincuenta años". "Los derechos y exigencias de cada parte serán tenidos debidamente en cuenta, y regulados de manera ecuánime, si y cuando prevalezca en todos la voluntad de justicia y de reconciliación". La Cooperación interreligiosa El Papa culmina la carta con un llamado a la responsabilidad específica de los líderes religiosos. "Las confesiones cristianas y las grandes religiones de la humanidad han de colaborar entre sí para eliminar las causas sociales y culturales del terrorismo, enseñando la grandeza y la dignidad de la persona y difundiendo una mayor conciencia de la unidad del género humano". "En particular, estoy convencido de que los líderes religiosos judíos, cristianos y musulmanes, deben tomar la iniciativa, mediante la condena pública del terrorismo, negando a cuantos participan en él cualquier forma de legitimación religiosa o moral". "Un compromiso de este tipo por parte de las religiones –agrega además– no puede dejar de adentrarse en la vía del perdón, que lleva a la comprensión recíproca, al respeto y a la confianza". "Justamente por esta razón, la oración por la paz no es un elemento que viene después del compromiso por la paz. Al contrario, está en el corazón mismo del esfuerzo por la edificación de una paz en el orden, en la justicia y en la libertad", concluye el Sumo Pontífice, al recordar que orar por la paz "significa abrir el corazón humano a la irrupción del poder renovador de Dios", y explica así la razón por la que "he invitado a los representantes de las religiones del mundo a acudir a Asís, la ciudad de San Francisco, el próximo 24 de enero, para orar por la paz". Más información Lea el Mensaje completo o bájelo a su computador
Se frustra encuentro entre canciller israelí y autoridades vaticanas VATICANO, 11 Dic. 01 (ACI).- El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro-Valls, explicó hoy que, debido a lo intempestivo del pedido, se frustró un encuentro entre el ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Shimon Peres, y las autoridades del Vaticano. Navarro-Valls explicó que este martes, con ocasión de una visita de Peres a Italia para discutir temas de seguridad con la Unión Europea, "con pocas horas de antelación y mediante la Embajada de Israel ante la Santa Sede, se solicitó audiencia al Santo Padre, al Secretario de Estado, Cardenal Angelo Sodano y al Secretario para las Relaciones con los Estados, Arzobispo Jean-Louis Tauran, el martes 11 de diciembre entre las 12:00 y las 12:30 (hora de Roma)". "A causa de los compromisos ya emprendidos y del breve tiempo de aviso, se ha revelado imposible para el Santo Padre poder recibir a ese ilustre huésped". "Su Santidad ha establecido que fueran el Cardenal secretario de Estado, Angelo Sodano y el Secretario para las Relaciones con los Estados, Arzobispo Jean-Louis Tauran, quienes recibieran en su nombre al ministro Peres". Por ello, la audiencia se fijó para el martes 11 de diciembre a las 12:30. Sin embargo, a las 9:30 de la mañana del mismo día, el embajador de Israel Yosef Neville Lamdan, llamó por teléfono para decir que, "desgraciadamente, el Ministro no podía desplazarse al Vaticano a la hora establecida debido a los compromisos con las autoridades italianas".
VATICANO, 11 Dic. 01 (ACI).- Al recibir a los pastores de la Iglesia caldea venidos de Irak, Irán, Líbano, Egipto, Siria, Turquía y Estados Unidos presidido por el Patriarca Raphäel I Bidawid, el Papa Juan Pablo II pidió a los obispos contribuir a la paz en la región mediante el impulso de la comunión. En su discurso en francés, el Papa hizo un llamado a los responsables de las naciones por el "restablecimiento de una paz justa y duradera en esta región del mundo y para que cesen todos los atentados a la seguridad de las personas y al bien de los pueblos". El obispo es "el servidor de la unidad cuando trata de sostener a los sacerdotes, sus colaboradores" y cuando "con sus hermanos obispos de una misma región o de un mismo rito, o de ritos diferentes, se esmera en desarrollar las colaboraciones y en discernir los signos de los tiempos", dijo el Pontífice. "Os pido –continuó el Santo Padre– que estéis especialmente atentos a las estructuras de comunión dentro de vuestra Iglesia patriarcal". "En el nombre del Señor, os exhortó a superar todo espíritu partidista para unir cada vez más vuestras fuerzas. ¡Que todo se desarrolle con franqueza fraterna, para que busquéis sin cesar la voluntad del Señor y que el interés personal no pase por encima del servicio pastoral que tenéis encomendado!". Juan Pablo II se refirió luego a la "urgencia pastoral de los fieles que viven en la diáspora". En este sentido, hizo hincapié en "la grave dificultad del fenómeno de la emigración" que se ve "todavía más acentuado por las sanciones económicas contra Irak". "Vosotros no podéis afrontar este drama sino colegialmente, con la convicción de que el futuro de la Iglesia caldea se juega también en la diáspora", concluyó.
VATICANO, 11 Dic. 01 (ACI).- Al presentar en la Oficina de Prensa de la Santa Sede el mensaje del Papa Juan Pablo II para la XXXIV Jornada Mundial de la Paz, el Cardenal François-Xavier Nguyên Van Thuân, Presidente del Pontificio Consejo "Justicia y Paz", señaló que el histórico texto titulado "No hay paz sin justicia; no hay justicia sin perdón", transmite la firme esperanza del Pontífice a pesar de la conflictiva situación mundial. "Desde el inicio de su mensaje, el Santo Padre ha querido subrayar el factor esperanza: las tinieblas del mal no son nunca suficientes para obscurecer la luz de la providencia divina, sino todo lo contrario, la hacen resaltar más y por eso, la Iglesia mira con confianza inquebrantable hacia el nuevo año 2002, a pesar de los terribles hechos sangrientos del 11 de septiembre", dijo el Purpurado vietnamita. Testimonio personal Describiendo el histórico documento, marcado por un contenido fuertemente personal que lo distingue de los anteriores mensajes, el Cardenal señaló que "Juan Pablo II se abandona a un testimonio personal, recordando los ‘indecibles sufrimientos’ causados por los totalitarismos del siglo pasado y expresando el profundo convencimiento de que la vía para instaurar el orden en el mundo pasa por la justicia y el perdón". El mensaje, continuó el Cardenal, afronta el tema del terrorismo, poniendo de relieve que "se basa en el desprecio de la vida del hombre" y constituye "un auténtico crimen contra la humanidad". Por tanto, existe "un derecho a defenderse del terrorismo", un derecho que debe "atenerse a reglas morales y jurídicas, tanto en la elección de los objetivos como en la de los medios". Rechazo a "fundamentalismo fanático" El Cardenal señaló también que el Papa ve el terrorismo como "hijo de un fundamentalismo fanático" y subrayó que "el fanatismo fundamentalista es una actitud radicalmente contraria a la fe en Dios" y "ningún responsable de las religiones puede ser indulgente con el terrorismo y, menos aún predicarlo". Posteriormente, el Santo Padre invita a los jefes religiosos judíos, cristianos y musulmanes a condenar el terrorismo públicamente "negando a quienes participan en éste cualquier forma de legitimación religiosa o moral".
ROMA, 11 Dic. 01 (ACI).- La página www.clerus.org que ofrece la Pontificia Congregación para el Clero está promocionando el "Missio - clerus.org off line", un nuevo servicio que permite a los usuarios trabajar dentro de la biblioteca electrónica sin estar conectado a Internet. El usuario puede realizar las búsquedas, como lo hace en la web, leyendo la ficha de cada documento, libro o artículo para ver si es realmente lo que desea. Una vez encontrado lo que se buscaba, se conecta por un breve tiempo para descargar los títulos elegidos. Esto permite abreviar la conexión a Internet –que puede ser lenta o costosa– sin disminuir las prestaciones del servicio clerus.org. Descargando el programa e instalándolo en su computadora se podrá contar con todos los beneficios de la página y conectarse sólo en el momento de descargar los documentos seleccionados, permaneciendo éstos en su computadora, para formar así su propia biblioteca personal. Asimismo, el programa permite una actualización de los índices que posee; de esa manera usted mantendrá actualizados los títulos que existen en la web fuera de línea, en su propia computadora. Además se puede trabajar en diversas lenguas.
La Iglesia en Estados Unidos recuerda dramático aniversario del ataque terrorista WASHINGTON DC, 11 Dic. 01 (ACI).- En el marco de una serie de ceremonias –inaugurada por Presidente George W. Bush–, dirigidas a recordar los tres meses desde los atentados del 11 de setiembre, la Iglesia católica en Estados Unidos encabezó la tercera jornada de oración de la "Novena" propuesta por el episcopado. En octubre, los obispos norteamericanos lanzaron una campaña de oración de una "Novena", ha ser rezada el 11 de cada mes durante nueve meses, para pedir por la paz y por la conversión en el país. En esta ocasión, la jornada de oración se entrelazó con un número significativo de eventos civiles encaminados a recordar la tragedia. Lo civil y religioso se dieron de la mano especialmente cerca de los escombros del World Trade Center, donde operarios, bomberos y policías se unieron a familiares de las víctimas para recordar la fatídica fecha mientras un sacerdote franciscano, amigo del Capellán de los bomberos neoyorkinos que perdió la vida el 11 de setiembre, dirigía la oración en nombre de los católicos. La Novena La "Novena para el Día 11" rezada a lo largo del país, ha sido presentada por el Episcopado norteamericano como una iniciativa "para ayudarnos a recordar en oración a los hombres y mujeres que fallecieron el 11 de septiembre del 2001 como resultado de los ataques terroristas". La oración fue inspirada por una visita realizada al lugar de la tragedia, en la ciudad de Nueva York a mediados de octubre del 2001 por varios obispos. La Novena, también conocida como "Oración de Sanación y de Paz" es así: Dios mío ven en mi auxilio. Dios, creador de todo lo existente, Padre Nuestro que estás en
el Cielo . . . Padre Nuestro que estás en
el Cielo . . . Te lo pedimos por Nuestro Señor
Jesucristo tu Hijo,
Rosario por la Paz Además, como respuesta a la tragedia del 11 de septiembre, los obispos estadounidenses han designado el 1 de enero del 2002 como "Día Nacional de la Oración y de la Paz" y han invitado a todos los católicos del país a rezar el Rosario "para lograr la intercesión de María, Reina de la Paz".
CARACAS, 11 Dic. 01 (ACI).- Luego de la negación de rectificación por parte del presidente Hugo Chávez durante la jornada del paro cívico del pasado lunes, el secretario general de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), Mons. José Luis Azuaje, expresó que la Iglesia continuará trabajando como mediadora para propiciar un necesario diálogo entre el Gobierno y el sector empresarial. "Nosotros como Conferencia Episcopal y como institución vamos a seguir haciendo todos los intentos para que se dé el diálogo", afirmó el Prelado en declaraciones a una emisora de radio local. En referencia a la participación de la sociedad civil, el Obispo agregó que "pensamos que dio su respuesta ante toda una cantidad de decisiones que el mismo Gobierno ha tomado. Esta Venezuela la construimos todos y no solamente el sector gubernamental, que tiene una gran responsabilidad para el desarrollo del país, pero finalmente el desarrollo pertenece a la sociedad en pleno, por lo tanto no se puede desarticular ninguna de las instituciones de la sociedad". Sobre las alocuciones que el presidente Chávez realizó durante la jornada del paro cívico, Mons. Azuaje consideró que el mensaje de los tres discursos responden a un mismo esquema, los cuales según su opinión "desgraciadamente no abren ningún compás al diálogo ni al entendimiento". En este sentido, el Prelado afirmó que "corresponderá a la sociedad civil y a los que rodean al presidente Chávez, hacerle entender que es necesario el diálogo y el entendimiento en aquellas cosas que son importantes para todos los venezolanos y que no pueden ser decisión única del gobierno". Finalmente, el Obispo resaltó la necesidad de buscar caminos en conjunto, y en referencia a la falta de rectificación, consideró que los venezolanos están acostumbrados a escuchar muchas palabras que finalmente no tienen ninguna repercusión en las obras. "Esperemos que esto sea así, porque tal vez sea necesario estar pendiente de las obras de Chávez más que de sus palabras", concluyó.
LA PAZ, 11 Dic. 01 (ACI).- Alrededor de cuatro mil familias pobres del departamento podrán celebran su cena navideña con los paquetes de víveres distribuidos por la campaña de solidaridad Misión Noche Buena, impulsada por la Arquidiócesis de Cochabamba junto con la Unión Internacional Cristiana de Dirigentes de Empresas-Cochabamba (Uniapac) y varias empresas e instituciones locales. En conferencia de prensa, los impulsores de la campaña convocaron a más instituciones, empresas y personas particulares a sumarse a la campaña con donaciones en productos y efectivo, para preparar paquetes más consistentes y con mayor variedad de víveres. Con el compromiso y la participación de varias empresas, Misión Noche Buena nació en 1995 con el propósito de llegar con un paquete de alimentos variados a las familias más pobres de la ciudad y provincias. Durante seis años, hasta el año 2000, se benefició a 23 mil familias, habiéndose logrado recaudar aproximadamente 320 mil dólares. Este séptimo año, el objetivo es entregar los paquetes a cuatro mil familias pobres, las mismas que serán seleccionadas, como en anteriores años, por las diferentes Vicarias. Estas, a su vez, harán llegar los paquetes a las parroquias, para que éstos los entreguen directamente a los más necesitados. Los jóvenes de la Pastoral Juvenil colaborarán en el preparado y el embolsado de todos los víveres donados. "Los paquetes contendrán ingredientes que permitirán a cada familia poder disfrutar de una buena comida la noche de Navidad", manifestó el presidente de la Uniapac, Rafael Badani.
BOGOTÁ, 11 Dic. 01 (ACI).- Según informaron fuentes médicas, el Obispo de Buga, Mons. Hernán Giraldo Jaramillo –de 65 años– se encuentra fuera de peligro luego de que este domingo sufriera un síncope cardiaco cuando realizaba sus ejercicios para la columna. El Prelado, hermano del presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana, Mons. Alberto Giraldo, se encuentra recluido en la sala de cuidados intensivos de la Clínica de Occidente de Tuluá, donde permanecerá varios días. De acuerdo con el parte médico, a Mons. Giraldo Jaramillo se le pudo bajar la tensión arterial y el ritmo cardíaco mientras nadaba, por lo cual perdió el conocimiento. El hecho ocurrió a las 6 de la mañana, hora en que el Obispo acostumbra realizar sus ejercicios para la espalda luego del accidente de tránsito en Málaga, Santander. De acuerdo con los médicos que lo atienden, el Prelado ingirió una gran cantidad de agua que se le depositó en los pulmones, por lo que está sometido a terapias respiratorias. Según su hermano, Mons. Alberto, afortunadamente "no registra lesiones de tipo cerebral ni cardíaca. Los electrocardiogramas y las escanografías no mostraron problemas".
LA HABANA, 11 Dic. 01 (ACI).- A casi 40 años de la imposición del socialismo en Cuba, la devoción a Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, Patrona de Cuba, sigue prácticamente intacta entre los cubanos. Así lo ha testimoniado Marie Sanz, una periodista de la agencia de noticias France Presse, quien recientemente visitó el santuario mariano. Según Sanz, "a pesar de décadas de socialismo", los cubanos "continúan depositando sus sueños más humildes y más locos" a los pies de la Virgen de la Caridad del Cobre. "Con su vestido ricamente bordado, coronado de oro, engalanado con perlas, rodeada de flores, la Virgen, llevando en sus brazos al niño Jesús, está entronizada en esta basílica de la isla, 16 kilómetros al oeste de Santiago de Cuba, en el pueblo de El Cobre, en el oriente de la isla. El poblado toma su nombre de las minas de cobre de sus alrededores, que datan del siglo XVI", describe la periodista al hacer un recuento de su visita. Sanz recuerda también que durante su histórico viaje a Cuba en 1998, Juan Pablo II calificó a la pequeña Virgen mulata como "el corazón mismo de la nación", su "Reina, Madre y Patrona", y celebró una Misa en su nombre donde la imagen de la Virgen, retirada de su santuario por primera vez desde la llegada al poder de Fidel Castro en 1959, fue conducida ante la presencia del Papa. "Cuarenta años de socialismo –dice la periodista francesa- no han alterado para nada la devoción y las peregrinaciones que ella inspira". "Desde los pobres hasta los poderosos, todos son recibidos en los largos pliegues de su manto tendido en forma de abanico", agrega. En la sala de las ofrendas, ante un altar de plata, se observan los objetos más heterogéneos que van desde diplomas universitarios a un cálculo renal expuesto en una pequeña caja, cartas y fotografías. "En las vitrinas y en las paredes se alinean charreteras militares, medallas castrenses, pequeños objetos de plata, brazos y piernas en miniatura, símbolos de milagros producidos", describe Sanz. La descripción de lo visto en el Santuario continúa: "En una fotografía en colores, una madre radiante posa con su pequeño hijo: ‘Para ti, que con tanta fe te pedí esto que hoy tengo, mi hijo y tu hijo’, indica una carta que acompaña la imagen. Sobre un simple y pequeño papel blanco, unas palabras fueron garabateadas junto a un par de medias blancas ‘sin usar para pagar una promesa’ que se hizo para obtener salud, precisa su autor". Personalidades presentes Incluso personalidades que el régimen de Castro presenta como héroes del sistema socialista se hacen presentes en el Santuario con gesto elocuentes de devoción. Así, describe Sanz, se encuentran la medalla de oro de los Juegos Panamericanos de Winnipeg en 1999 y la medalla de plata de las Olimpíadas de Sidney 2000 del saltador de altura cubano Javier Sotomayor; además de zapatillas de las estrellas del Ballet Nacional de Cuba y algunos guantes de boxeo. "Según la historia de la basílica, la propia madre del gobernante Fidel Castro dio en ofrenda una figurita en oro para agradecer a la Virgen el haber protegido a su hijo. El escritor estadounidense Ernest Hemingway, quien vivió 22 años en la isla, le entregó en ofrenda la medalla de su Premio Nobel de Literatura", explica la periodista. Finalmente, Sanz describe una imagen de esta Virgen Mambisa implorante, "mostrada en un gran afiche en blanco y negro, donde con decenas de firmas se exige ‘la libertad de los presos políticos’, una súplica pública inaudita en Cuba, que nadie se ha atrevido a retirar de ese lugar". Familias visitan a la Virgen de Guadalupe en Guatemala GUATEMALA, 11 Dic. 01 (ACI).- Esta semana numerosas familias guatemaltecas iniciaron las actividades tradicionales para celebrar la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, que este año culminarán el miércoles 12 con una procesión de más de 7 kilómetros por las calles del Centro Histórico. Desde este domingo decenas de familias acuden al Santuario con sus niños a visitar a la Virgen Morena, y como es tradición, los pequeños son vestidos con diferentes trajes típicos del país. Para varios padres, asistir al Santuario es una manera de fomentar la devoción hacia la Virgen María y compartir con sus seres queridos. Las actividades centrales se iniciarán hoy por la tarde y proseguirán a las 7 de la noche con una serenata a la Virgen. Mañana a las 5 a.m. se realizará una alborada y la procesión saldrá a la 1 de la tarde. Asimismo, ayer se llevó a cabo una procesión infantil que recorrió las calles aledañas al Santuario y en donde los niños que acompañaron el cortejo vestían diversos trajes típicos. Francisco Castellanos, presidente de la Hermandad de la Virgen de Guadalupe, asegura que son los niños los que más devoción demuestran en esta actividad. Por su parte, una madre que acompañaba a su hijo afirmó que "es una tradición bonita que une a las familias"; y una madre de tres niñas que participaban también en el cortejo agregó que "cuando yo era pequeña, también me vestía con trajes típicos, y ahora visto a mis hijas". Tradición La devoción a la Virgen de Guadalupe fue introducida por los españoles a mediados del siglo XVIII. A finales del siglo XIX, las familias acaudaladas empezaron con la tradición de vestir trajes típicos y tomarse fotografías en estudios. El Santuario de Guadalupe, ubicado en la zona 1, se construyó por iniciativa del sacerdote Julio Flores, después de los terremotos de 1917-18. Las puertas del Santuario están fabricadas con monedas fundidas donadas por miles de feligreses. En ellas destaca la efigie de fray Juan de Zumárraga, Arzobispo de México al momento de las apariciones. Los vitrales multicolores del templo fueron destruidos por el terremoto de 1976. |