Un grupo de jóvenes estaban reunidos deliberando sobre las circunstancias en las que el aborto podría ser permitido. Su guía, al ver lo polarizada que estaba la discusión intervino diciendo: "Hace tiempo una mujer planteó el siguiente caso: todos mis hijos manifiestan cierto retraso mental, mi marido es alcohólico y tengo problemas de salud, y ahora estoy embarazada, ¿debo abortar o no?"
De inmediato, los jóvenes empezaron a polemizar sobre el caso, y al final el grupo quedó fuertemente dividido: los que apoyaban el aborto, quienes argumentaron que no era conveniente que la mujer corriera el riesgo de traer un ser anormal al mundo y era preferible conservar su salud en beneficio de toda su familia; y los que no, quienes sostenían que todo ser humano tiene derecho a la vida, por más adversa y difícil que puedan resultar las circunstancias que lo rodea.
El guía de los jóvenes, entonces contestó: "Si esta mujer abortaba, hubiese asesinado a Beethoven, pues esa era precisamente la circunstancia familiar en que este gigante de la música universal encontró al llegar a la vida".
Sandra Lubreto