Población 62.110.000: musulmanes 94%, coptos 6%, católicos 216.506
La Constitución egipcia proclama la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley, sin distinciones de lengua, raza o religión. El sistema jurídico, sin embargo, está islamizado: en 1971 el Tribunal constitucional estableció que "el Islam es la religión del Estado y cualquier ley contraria al Islam es contraria a la Constitución". El proselitismo cristiano no está prohibido formalmente, pero un artículo del Código Penal, que castiga las acciones contra la paz social, se usa contra los musulmanes convertidos al cristianismo.
En el país se han difundido los movimientos musulmanes, reprimidos con fuerza por el gobierno. Algunos grupos terroristas atacan a los coptos, sobre todo en el Alto Egipto, donde es más densa la presencia cristiana. Se trata de una zona rural, donde es común arreglar un conflicto con el fusil antes que ante el juez. Muchos de los conflictos definidos "confesionales" serían más bien el producto de un arcaico sistema de arreglo de cuentas, y muchos enfrentamientos habrían sido provocados por luchas de trasfondo económico y social entre los miembros de ambas comunidades, que degeneraron progresivamente en saqueos e incendios de las tiendas recíprocas.
Pero no faltan las experiencias de diálogo en la base. La parroquia greco-católica de Santa María de la Paz en El Cairo es un punto de referencia para el diálogo islamo-cristiano. Enfrentamientos periódicos son organizados por la asociación Al-ikhaa ad-dini (la Fraternidad religiosa) compuesta por fieles de ambas religiones, que comienzan con una oración en la que se pide a Dios que cada miembro sea fiel a su experiencia religiosa.