Autor: Bosco (El)
Museo: Palacio Real de Madrid
Caract: Oleo sobre tabla 150 x 94 cm.
Estilo: Pintura Flamenca
Frente al habitual paroxismo iconográfico que presenta la obra del Bosco, tenemos ante nosotros un cuadro convencional, dentro del más puro estilo de la pintura alemana o flamenca de la época del Bosco. No hay monstruos ni visiones oníricas, aunque la presencia del mal y del pecado es tan palpable como en los cuadros más desbordantes de su autor. La obra es una de las más grandes que pintó el Bosco, como pintura única y no como tríptico, claro está. Al fondo vemos una ciudad llena de edificios fantásticos, tal y como los artistas europeos imaginaban las ciudades de Oriente e Israel. En el paisaje observamos una pareja, la Virgen consolada por San Juan Bautista. En el grupo principal destacan las miradas llenas de dureza y reprobación hacia el espectador de Cristo y el soldado. Entre los que siguen el cortejo se encuentran rostros de avariciosos, hipócritas, crueles, etc. En sus vestidos hay insignias extrañas y adornos exóticos, que escapan a la interpretación convencional.