Autor: Bosco
(El)
Museo: Museo Boymans-van BeuningenS
Caract: Dibujo
Estilo: Pintura Flamenca
La increíble variedad de figuras y personajes que se aprecia en la obra del Bosco provenía en última instancia de la naturaleza, que el Bosco se ocupaba de recomponer y combinar según los ojos de su fantástica imaginación. Para ello, hubo de tomar algunos apuntes del natural, como podría parecernos a primera vista este Nido de Lechuzas. Sin embargo, si nos fijamos en los pequeños detalles del dibujo, encontraremos diversos elementos, aparentemente casuales pero con un posible significado secundario. La elección de la lechuza no es casual: la lechuza era un animal asociado al mundo diabólico, nocturno, rapaz, bebía por las noches el aceite de las lámparas de iglesias y lugares comunes... La lechuza se asociaba en la Edad Media con la herejía. Este pájaro ha ocupado el tronco de un pino y su polluelo se está desarrollando en su interior. Otros pájaros rodean el nido y aletean con violencia. Según parece, las lechuzas les han robado el nido. Uno de los pájaros acecha a unas arañas, mientras otro parece atacar a una de las lechuzas. La construcción de estas escenas secundarias es deliberada y debe de atender a algún propósito. Pero además, el paisaje miniaturístico del fondo nos ofrece nuevas historias: de una ciudad lejana, llena de torres y agujas, parte un ejército o comitiva de jinetes. A su izquierda vemos una plataforma elevada con un orante: se trata con toda probabilidad de Simón el Estilita, santo que pasó toda su vida en lo alto de una columna orando a Dios. Al otro lado vemos una cruz y un personaje togado... Incluso en un pequeño trozo de papel como éste el Bosco concentra toda su capacidad de sugerencia y narración, con el eje central puesto en la Herejía, su gran preocupación en una época previa al cisma de los luteranos.