VATICANO,
La historia de una familia peruana inmigrante en Italia ha llamado la atención durante la convalecencia del Papa Francisco en el Hospital Gemelli de Roma, lugar donde se viene recuperando tras la cirugía abdominal que se le realizó el pasado 7 de junio.
Durante este tiempo, el Pontífice ha recibido dos cartas de gran tamaño de la familia de Miguel Ángel, a quien había bautizado en marzo en el mismo hospital.
Marcela del Rosario Pariona Bárcena, la madre del bebé, considera este acontecimiento como un "doble milagro", ya que el Papa Francisco se convirtió en el "padrino" de su hijo y contribuyó a su sanación.
Según Marcela, esta experiencia es un regalo extraordinario de Dios. La historia de Miguel Ángel incluye una caída en sus primeros días de vida y un diagnóstico médico que llevó al pequeño a recibir atención especializada en neurocirugía.
El 30 de marzo, Miguel Ángel, recién nacido, se cayó de la silla para bebé y sufrió un golpe en la cabeza. Marcela, madre del menor, cuando vio que perdía el conocimiento, corrió a toda velocidad en automóvil para dirigirse al Hospital Humberto I y luego al Hospital Gemelli, todo con la ayuda de dos mujeres policías.
"Mi hijo ingresó debido a un traumatismo craneal por una fractura y pequeños coágulos de sangre. Para una madre, es un miedo enorme, un dolor inmenso", cuenta Marcela en diálogo con ACI Prensa.