En el Día Mundial del Donante de Sangre, que se celebra este 14 de junio, el sacerdote Mateo Bautista García, de la Orden de San Camilo, llevó a cabo en Lima (Perú) su donación de sangre número 160 y alentó a todos a practicar también esta acción de "comunión solidaria" con los demás.
El Día Mundial del Donante de Sangre "constituye una oportunidad especial de festejo y agradecimiento a los donantes voluntarios de todo el mundo y se ha convertido ya en un momento particularmente propicio para adoptar medidas dirigidas a lograr el acceso universal a las transfusiones de sangre sin riesgos", explica la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su sitio web.
"Cada donación es un regalo muy valioso que salva vidas, y donar sangre periódicamente es fundamental para disponer de un suministro de sangre inocuo y sostenible", agrega.
En declaraciones a ACI Prensa, el P. Bautista, Doctor en Pastoral de la Salud, dio gracias a Dios por haber llegado a su donación número 160 para salvar vidas.
"La sangre hay que considerarla como un medicamento básico e imprescindible. Sin la sangre se paraliza un hospital y el mismo sistema de salud. Necesitamos sangre desde el mismo momento del nacimiento, pasando por accidentes, quemaduras, trasplantes, tumores, leucemia, anemia, accidentes de tránsito o catástrofes", continuó.
Tras recordar que la sangre no se fabrica artificialmente ni en laboratorios, el P. Bautista animó a que todas las personas que pueden donarla lo hagan al menos una vez al año. Así "cada país va a tener sangre abundante analizada y preparada sin tener que pedir a nadie. Es una cuestión de comunión solidaria".