REDACCION CENTRAL,
Mons. Giovani Arana, Obispo de El Alto y Secretario General de la Conferencia Episcopal Boliviana, señaló este domingo de Pentecostés que, aunque la Iglesia en el país ha pedido perdón a las víctimas y familiares, "sabemos que no es suficiente".
"Estas semanas hemos sido testigos de que en el interior de la Iglesia se han cometido abusos a menores. Hemos pedido perdón, sabemos que no es suficiente, por eso debemos comprometernos todos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para evitar que hechos tan terribles se repitan o queden en la impunidad", indicó durante su homilía del 28 de mayo.
Según el Prelado, los obispos "deben trabajar juntos desde lo que nos toca hacer, para crear ambientes sanos y seguros para niños, adolescentes, jóvenes y toda persona vulnerable".
"Y digo 'trabajar juntos' porque la lucha contra el abuso sexual conlleva un cambio profundo en cada uno de nosotros para estar siempre atentos a cualquier peligro que corran niños, jóvenes o personas vulnerables", resaltó.
A fines de abril un escándalo de abuso sexual sin precedentes sacudió a la Iglesia Católica en Bolivia, después de que un informe del diario El País señalara al jesuita Alfonso Pedrajas Moreno, fallecido en 2009, de haber cometido abusos contra menores durante su ministerio.
A raíz de la investigación, salieron a la luz numerosos casos de abusos en la Compañía de Jesús y otras congregaciones. El Procurador General del Estado, informó al país que, hasta el 18 de mayo de 2023, había unos 23 sacerdotes implicados en casos de abusos en el país.