VATICANO,
El Papa Francisco presidió, como cada miércoles, la Audiencia General desde la Plaza de San Pedro del Vaticano. Este 17 de mayo, centró su catequesis en San Francisco Javier, el patrón de las misiones católicas.
El Santo Padre explicó que, tras este santo, partió un "numeroso grupo de misioneros apasionados, preparados para soportar fatigas y peligros inmensos, a alcanzar tierras y encontrar pueblos de culturas y lenguas completamente desconocidas, impulsados sólo por el fortísimo deseo de dar a conocer a Jesucristo y su Evangelio".
Recordó que San Francisco Javier pasó en barco más de tres años y medio, un tercio de la duración de su misión. Fue en Goa, en la India, donde Javier puso su "base", aunque, según precisó el Papa, "no se detiene allí".
"Va a evangelizar a los pobres pescadores de la costa meridional de la India, enseñando catecismo y oraciones a los niños, bautizando y cuidando a los enfermos".
"Para esta gente no había horizontes. Estos santos misioneros eran valientes, también los de hoy", destacó el Santo Padre.
Más tarde, señaló que San Francisco Javier llegó a Japón, donde pasó 3 años "durísimos", debido principalmente "al clima, las oposiciones y el desconocimiento de la lengua, pero también aquí las semillas plantadas darán grandes frutos". "Qué gran soñador, Javier", destacó el Papa.