VATICANO,
El sábado 13 de mayo, en el Vaticano, el Papa Francisco recibió al presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, durante una parada en Roma en su viaje al extranjero.
La audiencia privada entre el Papa y el presidente ucraniano duró 40 minutos, indicando la preocupación y la atención del Santo Padre hacia "el martirizado pueblo de Ucrania". "Gracias por esta visita", expresó el Pontífice dándole la bienvenida en el Aula Pablo VI.
Durante el intercambio de regalos, el Santo Padre entregó al presidente una obra de bronce que representa una rama de olivo, símbolo de la paz, así como el mensaje para la Paz de este año, el documento sobre la fraternidad humana, el libro sobre la Statio Orbis del 27 de marzo de 2020 y el libro "Una encíclica sobre la paz en Ucrania".
Por su parte, el presidente Zelensky entregó al Papa Francisco una obra de arte hecha con una placa antibalas, que representa una imagen mariana, y un cuadro titulado "Pérdida", que representa la matanza de niños durante el conflicto y el dolor de la ausencia de los infantes para la nación.
El Pontífice habló sobre una mediación a favor de los niños ucranianos deportados en Rusia en su vuelo de regreso desde Budapest a Roma. En los 13 meses de guerra y en los más de 130 llamados a favor de la paz, el Papa ha reiterado que está cerca de los ucranianos con su oración: "Su dolor es mi dolor".
Los temas de la conversación giraron en torno a la situación humanitaria y política en Ucrania provocada por la guerra en curso, según la Oficina de Prensa de la Santa Sede. "El Pontífice prometió sus oraciones constantes, puestas de manifiesto por sus numerosos llamados públicos y su continua invocación al Señor por la paz desde febrero del año pasado", cuando comenzó la guerra.