VATICANO,
Este jueves 11 de mayo, el Papa Francisco recibió a los miembros de la Conferencia de Institutos Misioneros en Italia con motivo de su 50 aniversario, a quienes recordó que el anuncio "siempre debe estar acompañado por la escucha de la Palabra, la celebración Eucarística y la oración".
Al dirigirse a los misioneros presentes en el Palacio Apostólico del Vaticano, el Pontífice resaltó que, para la Iglesia, "el anuncio no es un aspecto opcional o marginal, sino una dimensión vital, ya que nace apostólica y misionera, configurada por el Espíritu Santo como comunidad en salida".
Además, afirmó que "la misión es oxígeno para la vida cristiana, que sin ella enferma y se marchita y se vuelve fea".
El Santo Padre destacó algunas de las labores de los misioneros, como "la animación misionera de las comunidades locales, la sensibilización de los jóvenes en los seminarios, la animación vocacional, la contribución a la redacción de documentos misioneros a diversos niveles, o la sinergia con otras realidades eclesiales".
De este modo, les invitó a "seguir adelante con valentía, para que la fuerza del Espíritu encuentre siempre en la Iglesia y en el mundo mentes y corazones deseosos de sembrar la Palabra y de llevar a todos la alegría del Señor Resucitado, rompiendo barreras y favoreciendo la construcción de una sociedad fundada en los principios evangélicos de caridad, justicia y paz".
Más tarde, recordó las "dimensiones fundamentales" de la misión establecidas por San Pablo VI, como son "el testimonio, la predicación de la Palabra, la catequesis y la celebración de los sacramentos".