VATICANO,
El Papa Francisco abordó el drama del abuso sexual en la Iglesia Católica en su encuentro con miembros de la Compañía de Jesús (Jesuitas) en Hungría, y respondió a la interrogante de cómo seguir el mandamiento de Jesús de amar a los enemigos en el caso de los abusadores.
En el segundo día de su viaje apostólico a Hungría, el 29 de abril, el Santo Padre se encontró con los jesuitas del país.
En un diálogo abierto, publicado por La Civiltà Cattolica el 9 de mayo, el Pontífice abordó con sus correligionarios (Jesuitas) diversos argumentos, entre ellos el de los abusos cometidos por miembros del clero, la pastoral juvenil o la recepción del Concilio Vaticano II.
Los escándalos de abuso han dañado a la Iglesia y han sido un gran reto para el Papa Francisco durante sus diez años de gobierno pastoral.
El pasado 5 de mayo, el Pontífice denunció que "el abuso sexual de menores por parte del clero y su mala gestión por parte de los líderes eclesiásticos han sido uno de los mayores desafíos para la Iglesia de nuestro tiempo".
En este contexto, durante la visita del Papa a Budapest, un jesuita húngaro le preguntó cómo era posible seguir el mandamiento de Jesús de amar a los enemigos cuando se trataba de un abusador sexual.