En el día en el que la Iglesia Católica celebra a San José Obrero, el Papa Francisco recordó que el santo es ejemplo "en medio de las tormentas de la vida".
"San José nos enseña que, en medio de las tormentas de la vida, no debemos tener miedo de ceder a Dios el timón de nuestra barca", escribió el Santo Padre.
La fiesta de San José es celebrada tradicionalmente por la Iglesia el 19 de marzo. Sin embargo, en 1955, en medio de las distorsiones del socialismo marxista sobre el mundo del trabajo, el Papa Pío XII estableció la celebración de San José Obrero para cada 1 de mayo.
El 1 de mayo se conmemora también en muchos países, como una festividad civil, el Día del Trabajo.
Pío XII recordó el 1 de mayo de 1955 que "el humilde artesano de Nazaret no sólo encarna la dignidad del trabajador ante Dios y la Santa Iglesia, sino que es también siempre el guardián providente" de los trabajadores.