El presidente de la Conferencia Episcopal Portuguesa (CEP), Mons. José Ornelas, pidió este jueves perdón, en nombre de la Iglesia, a cada una de las víctimas de abusos sexuales cometidos en ámbitos eclesiales.
El prelado hizo este pedido al inicio de la Misa celebrada en la Basílica de la Santísima Trinidad, en Fátima, como parte de la jornada nacional de oración por las víctimas de abuso sexual, de poder y de conciencia en la Iglesia, convocada por la CEP y que coincide con la clausura de la Asamblea Plenaria que comenzó el 17 de abril.
El abuso sexual de menores y adultos vulnerables ha sido un tema constante en la CEP desde que en febrero se publicó el informe final de la Comisión Independiente para el Estudio del Abuso Sexual de Niños en la Iglesia Católica en Portugal. Según este documento, hay al menos 4.815 víctimas en el país, desde 1950 hasta 2022.
Al inicio de la Misa, Mons. Ornelas reconoció que "estos comportamientos son exactamente lo contrario de lo que somos y de lo que celebramos". "Por eso, imploramos el perdón de Dios, que pidió a sus discípulos que fueran misericordiosos y solidarios, en particular con los más pequeños y frágiles", expresó.
El presidente del Episcopado portugués señaló que el maltrato es "una conducta totalmente inicua, cruel y manipuladora, a veces disfrazada de atención, cariño e incluso de motivación religiosa".
"Como Iglesia que somos, asumimos el dolor, la perturbación y la rebeldía de este pueblo, tanto de los que tuvieron la dolorosa valentía de reaccionar y denunciar, como de los que callan, aún incapaces de hablar de esta realidad que les impedía el camino de una vida más feliz", subrayó.