REDACCION CENTRAL,
El Papa Francisco recordó este sábado el martirio del Beato Alfredo Cremonesi, sacerdote italiano asesinado hace 70 años en medio de un conflicto guerrillero en Birmania (hoy Myanmar), cuando servía como misionero en ese país.
En una audiencia concedida a peregrinos, al clero y al obispo de la Diócesis de Crema (Italia), ciudad de origen del beato, el Santo Padre aseguró que el P. Cremonesi nunca se "dejó intimidar ni desanimar por los malentendidos y la oposición violenta, hasta las ráfagas de ametralladoras que lo mataron".
"Incluso esta violencia extrema no detuvo su espíritu y no silenció su voz", indicó este 15 de abril, desde el Aula Pablo VI.
El martirio del Beato Cremonesi tuvo lugar el 7 de febrero de 1953, en la ciudad de Donok, cuando trabajaba en la evangelización de los birmanos en los pueblos montañosos. Cuando intentaba exiliarse, el ejército lo confundió con un rebelde y lo abatió a tiros.
"El P. Cremonesi trabajó en ese pueblo de montaña durante la mayor parte de su vida, y regresó allí varias veces, a pesar de mil dificultades y peligros, para estar cerca de su pueblo y construir y reconstruir lo que la guerra y la violencia seguían destruyendo", comentó el Pontífice.
Además, resaltó la tenacidad del presbítero para ejercer su ministerio, "entregándose sin cálculo y sin ahorros por el bien de las personas que le fueron encomendadas, creyentes y no creyentes, católicos y no católicos. Un hombre universal, para todos".