Con una multitudinaria Misa en la catedral de Rancagua, carabineros, autoridades, familiares y fieles en general dieron el último adiós al cabo primero Daniel Rodrigo Palma Yáñez, asesinado en cumplimiento de sus funciones.
El crimen ocurrió en la noche del 5 de abril, cuando el carabinero acudió a un llamado de emergencia. Al intentar fiscalizar un vehículo, recibió dos disparos.
Uno de los proyectiles le impactó en la cabeza, y aunque recibió atención médica, falleció horas después en el hospital.