"Que la buena noticia de que Jesús venció a la muerte para siempre no nos deje estáticos como muertos", exhortó. "No nos quedemos hundidos en nuestra depresión, nuestra angustia y nuestra tristeza, sino que tengamos actitudes positivas en nuestras vidas", agregó.
La Pascua, afirmó el Prelado de la diócesis más austral del país, "no sólo es una experiencia personal, sino que tiene que ser una experiencia social, una buena noticia que nos ponga en movimiento como sociedad, que nos haga transitar del temor a la alegría, más allá de las dificultades".
"Que la Pascua nos anime al compromiso y no a quedarnos estáticos, pasivos, como ciudadanos que no reaccionan frente a todo lo que pasa. Que podamos comprometernos cada día más, en las sociedades de fomento, en la escuela, en nuestro trabajo. Que sepamos que hay muchos hermanos que la están pasando mal y entre todos tenemos que sacar a nuestro país adelante", instó.
"El Señor resucitado también quiere que resucite nuestro pueblo, que resucite nuestra Argentina. Pero quedará en cada uno de nosotros", advirtió, llamando a "correr al compromiso de construir entre todos un país más solidario".
"Que podamos realmente vivir una pascua personal y que también lo podamos pasar por nuestro compromiso cristiano como ciudadanos. Que este saludo de Pascua también nos ayude a pasarlo por nuestra vida social, económica y en nuestra vida como pueblo, tratando entre todos de comprometernos por una Argentina mejor", concluyó.
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