BERLÍN,
El Arzobispo de Barranquilla, Mons. Rubén Salazar, y el Obispo de Santa Marta, Mons. Hugo E. Puccini, coincidieron en resaltar el papel fundamental que tiene la Iglesia en la búsqueda del restablecimiento de la paz y la reconciliación en Colombia.
Ambos obispos resaltaron, por un lado, la trascendencia de las constantes intervenciones de la Conferencia Episcopal de Colombia como mediadora entre el Gobierno y los grupos armados y, por el otro, el tremendo impacto del Evangelio en el restablecimiento de la justicia, comunicación y el logro de la reconciliación entre todas las partes de la sociedad.
En diálogo con los directores de la organización internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), Mons. Salazar explicó que en su Arquidiócesis una de las prioridades es la pastoral familiar.
En orden al fortalecimiento de la familia como “Iglesia doméstica” y base de la sociedad, el Prelado declaró haber dirigido una carta circular a las 400 mil familias de Barranquilla pidiéndoles reunirse en casa semanalmente para compartir en común el Evangelio.
Otra de las prioridades en la diócesis –agregó– es la promoción de las vocaciones al sacerdocio entre los jóvenes. El Obispo declaró que para una población de más de dos millones de católicos, tan sólo cerca de 100 sacerdotes son insuficientes. “Nosotros necesitamos urgentemente al menos 50 más”, dijo.
Las Mejores Noticias Católicas - directo a su bandeja de entrada
Regístrese para recibir nuestro boletín gratuito de ACI Prensa.