El movimiento provida se movilizó ayer en varias ciudades de Portugal, a pocos días de que el Parlamento vea un nuevo proyecto para legalizar la eutanasia, luego que el anterior texto fuera vetado en febrero por el presidente Marcelo Rebelo de Sousa.
La movilización fue promovida por la Federación Portuguesa por la Vida, que en un comunicado previo a la marcha denunció que en el país "la eutanasia es más discutida que el derecho a los cuidados paliativos".
La Marcha por la Vida tuvo lugar en ciudades como Lisboa, Oporto, Braga, Aveiro, Évora, Coimbra, Funchal y Santarém, entre otras.
El 9 de diciembre de 2022 la Asamblea de la República aprobó la ley que regula la eutanasia, luego esta pasó al presidente Marcelo Rebelo de Sousa, quien la envió a consideración del Tribunal Constitucional.
En enero de este año, el Tribunal declaró inconstitucional la ley. En su fallo señaló que se generó "una incertidumbre intolerable en cuanto al ámbito exacto de aplicación de la nueva ley".