El Juzgado de Inca en Mallorca (España) ha procesado por un nuevo presunto caso de abusos sexuales a menores a Pere Barceló, antiguo párroco que fue expulsado del estado clerical tras un proceso canónico por violar a una menor en reiteradas ocasiones.
Barceló salió de la cárcel de Segovia el pasado mes de agosto tras cumplir una pena de 6 años de prisión, por haber forzado sexualmente a una niña de 10 años entre 1997 y 1998 en al menos una decena de ocasiones.
No fue hasta el año 2012 cuando los hechos comenzaron a investigarse, ya que la agredida cumplió la mayoría de edad y se decidió a denunciar lo sucedido.
Antes incluso de esta denuncia, el Obispado de Mallorca había suspendido de manera cautelar a Barceló. La víctima fue indemnizada por la Iglesia Católica y Barceló procesado según el derecho canónico.
Así, fue reducido al estado laical antes de que concluyera el proceso penal de la justicia secular. Barceló fue el primer sacerdote español expulsado por un caso de abuso.
El nuevo caso se refiere a una denuncia por abuso sexual de una niña que acudía a catequesis entre los años 2008 y 2010, cuando contaba entre 7 y 9 años de edad, según detalla la agencia Europa Press.