La hermana María del Carmen Galicia, religiosa mexicana perteneciente a las Hermanas Misioneras Combonianas que trabajó en Sudán, un país africano en el que el 97% de su población es musulmana, resaltó que es posible la "coexistencia pacífica" entre los seguidores del Islam y los cristianos.
En diálogo con ACI Prensa, la religiosa relató que musulmanes "vienen, atienden y participan" en celebraciones católicas, como matrimonios y confirmaciones.
"Luego, cuando es el Ramadán", el mes dedicado por los musulmanes a la oración y a un intenso ayuno durante el día y hasta la puesta del sol, "también nos han invitado a comer con ellos" en las noches.
La hermana María del Carmen recordó que vivió en la región de Montes Nuba, al centro del país.
"Ha sido una zona abandonada, aislada: no hay carreteras, no hay luz, no hay agua, no hay servicios de primera necesidad, ¡qué decir de las escuelas! No había escuelas ni hospitales", continuó la religiosa.
De la mano de Mons. Macram Max Gassis, Obispo de El Obeid (Sudán) desde 1988 hasta 2013, en la región se pudo "construir escuelas, un hospital y también una radio donde estuve trabajando, con ayuda de benefactores".