REDACCION CENTRAL,
Una laica católica, identificada como "María" por temor a posibles represalias, detalló cómo es la persecución contra los católicos en Nicaragua, país donde la dictadura ha prohibido el Vía Crucis y las procesiones de Semana Santa.
"Este tiempo de persecución es un tiempo penitencial. Los nicaragüenses vivimos bajo el terror, el miedo y la angustia. Los psicólogos de nuestro país dicen que esto lo sufre toda la población", declaró "María", a la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN).
La dictadura encabezada por Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo, no sólo ha encarcelado al Obispo de Matagalpa, Mons. Rolando Álvarez, y condenado y deportado a católicos y miembros de clero, sino que "ha prohibido el ejercicio de piedad popular como es el Vía Crucis o procesiones", lamentó la mujer.
"Ya no salen de las parroquias a las calles como se ha hecho desde siempre", aseguró.
Según su testimonio, los sacerdotes y fieles son vigilados por los agentes del régimen, quienes llegan a las iglesias para "grabar las homilías".
"Yo formo parte de un grupo de oración que se reúne semanalmente, y en los últimos días hemos sido vigilados por un paramilitar que claramente va armado con pistola bajo la camisa", relató "María".