El caso de los protestantes en México va al revés, siempre en ascenso: en 1950 eran el 1.3%; en 1960 llegaron a 1.7%; en 1970 a 1.8%; en 1980 a 3.2%; en el 2000 alcanzaron el 7.3%; y en el 2020 ya eran el 11.2% de la población mexicana.
El 2 de febrero de 2023, los obispos publicaron el texto "'Síntesis sinodal'. Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión", que se enmarca en el Sínodo de los Obispos, que tendrá como tema "Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión".
Esta vez el Sínodo, que se realizará en octubre de 2023 y 2024 en Roma, tiene tres etapas: una diocesana, una continental y una universal. La primera ya ha terminado, está en marcha la segunda y la tercera se desarrollará en el Vaticano.
En el texto, los obispos reconocen que "las y los religiosos, así como los Movimientos Laicales, tuvieron poca participación" en la fase diocesana; en la que la mayoría fueron mujeres con un 55%, y en la que la edad estuvo entre los 35 y 65 años, cuando el promedio nacional es de 29.
"Los laicos que mayormente participan en los quehaceres pastorales de la Iglesia son mayores de edad (reconocemos que hay muy pocos jóvenes), y en ellos descansó mayormente la consulta, pero las diócesis que instrumentaron medios electrónicos y el uso de las redes sociales para consultar, obtuvieron mayor participación de jóvenes", explicó a ACI Prensa el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Mons. Ramón Castro Castro.
"Las estrategias para atraer jóvenes a la Iglesia están siendo instrumentadas de forma permanente: hay responsables, equipos, existen programas y una gran participación de la feligresía por contribuir a este objetivo", continuó el también Obispo de Cuernavaca. Sin embargo, señaló el Prelado, "la dinámica de vida de los jóvenes hoy enfrenta grandes desafíos (familiares, escolares, económicos, emocionales, etc.) que no siempre pueden responder como quisiéramos".