VATICANO,
En su encuentro con los desplazados internos de Sudán del Sur, el Papa Francisco pidió, con "el corazón en la mano", la colaboración para alcanzar la paz en el país africano.
En la tarde de este sábado 4 de febrero, el Papa Francisco se reunió con los desplazados internos de Sudán del Sur, personas que debido a la devastadora situación provocada por la guerra y los desastres naturales se han visto obligadas a abandonar sus hogares.
El encuentro tuvo lugar en el llamado "Freedom Hall", donde diferentes refugiados contaron al Santo Padre sus testimonios e hicieron algunas preguntas sobre el porqué de su situación.
El Sucesor de Pedro lamentó que "en este país martirizado ser desplazado o refugiado se ha convertido en una experiencia normal y colectiva".
Por ello, hizo de nuevo un llamado "a que cese todo conflicto" y pidió "retomar seriamente el proceso de paz para que finalicen las agresiones y la gente pueda volver a vivir de manera digna".
Reiteró la urgencia de la paz y la justicia y aseguró que "no podemos esperar más" para cambiar esta situación.