Este lunes 30 de enero el Papa Francisco nombró a Mons. Robert Prevost, hasta ahora Obispo de Chiclayo en el norte del Perú, como nuevo prefecto del Dicasterio para los Obispos en el Vaticano, una misión que asumirá el próximo 12 de abril y que ha suscitado gran júbilo en los obispos peruanos.
"Es una gran alegría", expresó Mons. José Antonio Eguren, Arzobispo Metropolitano de Piura, en declaraciones a ACI Prensa, y resaltó que se trata de "un reconocimiento para toda la Iglesia en el Perú, y en particular para la Provincia Eclesiástica de Piura, de la cual él forma parte como Obispo de Chiclayo".
"Estoy seguro de que, por sus grandes cualidades, estará a la altura de las altas responsabilidades que el Santo Padre le ha encomendado", aseguró el Prelado.
Entre estas tareas están seleccionar a los nuevos obispos antes de la aprobación papal, organizar las visitas ad limina al Vaticano, que los obispos de todo el mundo realizan cada 5 años, y "fomentar el afecto colegial de los obispos entre sí y de todos estos con Pedro y bajo Pedro", explicó el Arzobispo.
"Ofrecemos ahora y siempre nuestras oraciones y sincero afecto por su labor", recalcó.
Mons. Salvador Piñeiro, Arzobispo de Ayacucho y expresidente de la Conferencia Episcopal Peruana, compartió con ACI Prensa que los obispos "estamos contentísimos, porque es un hermano en el episcopado que va a tener esa gran responsabilidad en la vida de la Iglesia y siempre verá con mucho cariño a nuestra Conferencia Episcopal".