El P. Esteban Robles, vocero de la Diócesis de Culiacán, en el estado mexicano de Sinaloa, reveló cómo la Iglesia Católica salió al encuentro de los pobladores de Jesús María, tras la reciente captura de Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante Joaquín "el Chapo" Guzmán.
En declaraciones para EWTN Noticias, el P. Robles señaló que tras la incursión militar y policial que logró la captura de Guzmán, conocido como "el Ratón" y que sería uno de los cabecillas del Cartel de Sinaloa, cuando los pobladores de Jesús María empezaron "a salir, el primer lugar al que asistieron fue al templo".
"Jesús María es un lugar pequeño, tienen una capilla. Y ese fue el primer lugar al que las personas acudieron, buscando esperanza, buscando el refugio espiritual", indicó el sacerdote mexicano.
Ovidio Guzmán fue capturado el 5 de enero de este año, en el marco de un operativo realizado entre el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, en la localidad de Jesús María, a unos 50 kilómetros al norte de Culiacán.
El arresto de Ovidio Guzmán causó una ola de violencia en Culiacán y en otras ciudades de Sinaloa, llevando a que el Estado suspenda las actividades laborales y pida que los ciudadanos se mantengan en casa.
Guzmán fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad El Altiplano, mientras la justicia mexicana analiza un pedido de extradición a Estados Unidos.