VATICANO,
Mons. Georg Gänswein, secretario del Papa Benedicto XVI, cuenta en sus memorias recién publicadas las razones por las que el Papa Francisco decidió vivir en la Casa de Santa Marta y no en el Palacio Apostólico del Vaticano, donde por tradición habían vivido los Pontífices.
Según narra el Arzobispo en el libro "Nada más que la verdad", el 15 de marzo de 2013 acompañó al Papa Francisco al Palacio Apostólico para que tomara posesión del apartamento en la tercera logia.
"Le mostré cómo estaban dispuestas las habitaciones. También le dije que no tendría problemas para mudarse de la Casa Santa Marta, ya que todo estaba en orden y bastaba con una limpieza normal del local", explica en sus memorias.
"En ese momento no me dio respuesta -continúa Gänswein-, haciéndome saber que lo pensaría".
Más tarde, relata que el Papa Francisco invitó al Superior General de los jesuitas de aquel momento, P. Adolfo Nicolás, y le escribió: "Venid a Santa Marta, que mañana me tengo que trasladar al Palacio Apostólico y aquí tengo más libertad".
Al cabo de un par de semanas, el Arzobispo volvió a preguntarle, y el Santo Padre le dijo que "normalmente duermo como un tronco, pero la noche después de ver el apartamento dormí muy mal".