VATICANO,
En la mañana de este lunes 9 de enero, el Papa Francisco recibió en el Vaticano al Cuerpo Diplomático acreditado ante la Santa Sede, a quienes invitó a trabajar por la paz en un mundo donde "crecen las divisiones y las guerras".
Durante su discurso, el Papa Francisco subrayó que "la tarea de la diplomacia es precisamente la de allanar las divergencias para favorecer un clima de colaboración y confianza recíprocas para la satisfacción de las necesidades comunes".
Partiendo de la encíclica Pacem in terris de San Juan XXIII, el Santo Padre recordó que en aquel momento "estaba viva la amenaza de una guerra nuclear, provocada en octubre de 1962 por la así llamada crisis de los misiles de Cuba".
"Lamentablemente -continuó el Papa-, la amenaza nuclear es evocada todavía hoy, arrojando al mundo en el miedo y la angustia".
Por ello reiteró que "la posesión de armas atómicas es inmoral" y aseguró que "bajo la amenaza de las armas nucleares perdemos todos".
Más tarde, Francisco mostró su preocupación por "el estancamiento de las negociaciones acerca del reinicio del Plan de Acción Integral Conjunto, más conocido como Acuerdo sobre el programa nuclear iraní".