VATICANO,
El Presidente norteamericano George W. Bush le confirió al Papa Juan Pablo II este viernes la Medalla Presidencial de la Libertad, la más alta condecoración norteamericana para un civil, durante el encuentro entre ambos en el Vaticano.
Un funcionario de la Casa Blanca reveló que el Pontífice recibió la medalla en homenaje a “sus años de lucha por la libertad y por la importancia de su voz moral”.
En Noviembre pasado, el Congreso norteamericano aprobó por mayoría bipartidaria alentar al Presidente Bush a entregar al Pontífice la medalla presidencial por su contribución a la paz mundial y a la caída del comunismo.
“Juan Pablo II –dijo el Presidente- ha capitaneado la causa de los pobres, los débiles, los hambrientos y los marginados. Ha defendido la dignidad exclusiva de cada vida humana y la bondad de toda vida. Con su fe y su convicción moral, ha dado valor a los demás para ‘no tener miedo’ de vencer la injusticia y la opresión. Su enérgica defensa de la paz y la libertad ha inspirado a millones de personas ayudándoles a acabar con el comunismo y la tiranía.
“Los Estados Unidos rinden homenaje a este hijo de Polonia que se ha convertido en obispo de Roma y héroe de nuestra época”, concluyó el Presidente.
Ningún Pontífice en vida ha recibido la condecoración, que le fue conferida al Beato Papa Juan XXIII póstumamente en 1963.