Benedicto XVI manifestó en muchas ocasiones su preocupación y cuidado por diversos elementos de la liturgia, especialmente la música sacra.
Al respecto, el P. Esteban Sacchi, director del Grupo de Música Litúrgica de Buenos Aires (Argentina), recordó que para Benedicto XVI la música no es un añadido o un adorno de la liturgia, "sino que es parte misma de la liturgia".
El sacerdote argentino señaló que el Papa alemán manifestó en muchos de sus libros, escritos y discursos "la importancia de la música litúrgica para el desarrollo de nuestra fe y del centro de nuestra fe que es la liturgia misma".
El P. Sacchi también explicó que el Papa Benedicto XVI se preguntaba "¿cuál es el origen mismo de la música?, ¿por qué el hombre hace música?, ¿por qué el hombre canta?, ¿por qué el hombre toca instrumentos?".
El predecesor del Papa Francisco, mencionó el P. Sacchi, encontró las respuestas a estas preguntas "en tres experiencias que salen de la vida ordinaria del hombre".
Estas son las experiencias del amor, del dolor y del encuentro con lo divino.