"¡Santo Súbito!" (Santo ya) fue uno de los gritos de los miles de católicos que asistieron este jueves 5 de enero al funeral del Papa Emérito Benedicto XVI en el Vaticano.
Además de los gritos, en la Plaza de San Pedro se pudo leer un gran cartel que decía "SANTO SÚBITO".
Durante la Misa de funeral en la Plaza de San Pedro, presidida por el Papa Francisco, los fieles presentes lanzaron ese grito que anima a declarar santo pronto a Benedicto XVI, similar al que se oyó el 8 de abril de 2005, durante el funeral de San Juan Pablo II.
Fue el mismo Benedicto XVI quien, acogiendo el pedido de numerosos fieles y autoridades de la Iglesia, dispensó de los cinco años de espera para iniciar el proceso de canonización de Juan Pablo II, beatificado en 2011 y canonizado en 2014.
Luego de la Misa de funeral, Benedicto XVI será sepultado en las Grutas vaticanas, en la misma tumba donde originalmente reposó San Juan Pablo II, cuyos restos ahora son venerados en la capilla de San Sebastián, en la Basílica de San Pedro.