El Papa Emérito Benedicto XVI ya descansa "en los brazos de Santa María de Guadalupe", a quien "amó profundamente", aseguró el P. Eduardo Chávez, uno de los mayores expertos a nivel mundial en las apariciones marianas de 1531.
En recientes declaraciones a ACI Prensa, el P. Chávez, que también fue postulador de la causa de canonización de San Juan Diego, el vidente de la "Morenita" del Tepeyac, dijo que Benedicto XVI "amó profundamente a la Santísima Virgen de Guadalupe y quería que todos conocieran el porqué la Virgen de Guadalupe se había aparecido en México del 9 al 12 de diciembre de 1531, logrando esa perfecta inculturación del Evangelio".
"Ahora el Papa está ya en los brazos de Santa María de Guadalupe, en esa vida eterna, en esa gloria de la Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo".
"Que descanse en paz e interceda por todos nosotros", expresó el sacerdote mexicano.
El P. Eduardo Chávez recordó también "una anécdota" sobre Benedicto XVI "que revela mucho su relación con la Santísima Virgen de Guadalupe".
El sacerdote destacó que el fallecido Papa Emérito pidió a todos los obispos de América Latina unirse en la celebración de la Misa el 12 de diciembre de 2011, en la Solemnidad de la Virgen de Guadalupe, por el bicentenario de la independencia de las naciones latinoamericanas.