A pocos días de la Navidad, el Arzobispo de Bogotá (Colombia), Mons. Luis José Rueda Aparicio, inauguró y bendijo la Casa de Esperanza, una iniciativa para acoger a mujeres que llegan de lugares alejados en busca de servicios de salud para ellas o sus familiares y no tienen dónde pasar la noche.
El Prelado bendijo las instalaciones el 22 de diciembre. La Casa de la Esperanza está a cargo de las Hermanas Pequeñas Apóstoles de la Redención, una congregación fundada en Italia en 1949.
La hermana Rosmira Zapata explicó que la finalidad de la casa "es acoger a las señoras que tienen a sus familiares enfermos y ellas no tienen la posibilidad de pagar un hotel, un albergue para pasar la noche", y vienen de pueblos lejanos.
El centro de acogida se ubica en el sector de Las Cruces, "una zona vulnerable con muchas necesidades", pero también con "una gran sed por conocer y saber más del Señor".
La creación de este hogar ha sido articulada por el Centro para el Servicio del Desarrollo Humano Integral y tiene capacidad para 17 personas, que además de tener un lugar donde dormir, reciben alimentación.
Estas deben ser remitidas por las trabajadoras sociales o capellanes de los hospitales y, dependiendo de su situación económica, darían un aporte máximo de cinco mil pesos colombianos, que equivalen a menos de un dólar y medio.