El Arzobispo de Barranquilla (Colombia), Mons. Pablo Emiro Salas, lamentó la muerte del bombero Javier Enrique Solano Ruiz, ocurrida cuando trabajaba para sofocar el incendio en el muelle de Compas.
La madrugada del miércoles 21 comenzó un gran incendio en la zona industrial del puerto de Barranquilla, en las instalaciones de la compañía Bravo Petroleum.
Luego de 58 horas de iniciado el incendio, el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, informó este viernes que la emergencia había sido controlada. Sin embargo, el miércoles uno de los tanques explotó cerca de donde estaba el sargento Solano Ruiz, causándole la muerte.
"Lamentamos mucho este acontecimiento conocido por todos, de este deceso de este hermano nuestro, este servidor nuestro, que con heroísmo enfrentó la coyuntura, este incendio y lamentablemente perdió la vida en el cumplimiento de su deber", expresó Mons. Salas este viernes.
En declaraciones a Emisora Atlántico, el Prelado recordó que "la vida de todos nosotros transcurre así, en medio de las vicisitudes y de las contingencias propias de nuestra naturaleza expuesta a todo".