La agencia católica Catholic Relief Services (CRS) advirtió sobre el empeoramiento de la crisis alimentaria en Somalia e hizo un llamado "a los donantes a hacer más para evitar que la crisis se intensifique".
Rebecca Hallam, representante de país de CRS para Kenia y Somalia, explicó que "la gente se está muriendo de hambre, muchos de los cuales son mujeres y niños".
Según el último informe de Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria (CIF), esta crisis afecta a más de 5,6 millones de personas, de las cuales más de 200.000 ya alcanzaron niveles de escasez catastrófica de alimentos.
Hallam contó que las familias se ven obligadas a elegir entre comprar medicinas o adquirir alimentos para sus hijos.
"Por desesperación, millones de familias están vendiendo todo lo que tienen o están saliendo de sus casas para buscar comida y agua", lamentó la representante de CRS.
Esta crisis ha sido inducida por una sequía histórica y la volatilidad del mercado provocada en parte por la guerra en Ucrania.