LIMA,
“La Alegría en el Señor” es una escuela católica muy especial. En sus 50 años de existencia ha atendido a más de mil menores discapacitados de escasos recursos, que en ella reciben educación, rehabilitación, catequesis y abundante cariño.
Este mes, la peculiar escuela celebró sus bodas de oro con el renovado compromiso de evangelizar con alegría a los niños y sus familias.
Fundada por la laica alemana Rosemarie Stemmler y actualmente a cargo de las Hermanas Siervas del Plan de Dios, esta escuela se convirtió en el primer centro fundado para educar y formar de manera integral a niños y jóvenes con discapacidad física.
La escuela, ubicada en el distrito limeño de La Molina, tiene actualmente 90 niños en los niveles de educación inicial, primaria y secundaria.
Los menores, además de llevar los cursos propios de su grado, reciben terapia física, de lenguaje y ocupacional; asesoría psicológica permanente, talleres de computación, pintura y coro y la atención de un comedor infantil.
La escuela se financia gracias al apoyo de instituciones nacionales y extranjeras, además de donaciones personales que permiten a los menores –provenientes en su mayoría de los sectores más pobres de Lima- rehabilitarse de problemas físicos como distrofia muscular, cuadriplegía, parálisis cerebral, amputaciones o severas quemaduras.