VATICANO,
El Papa Francisco dio a los sacerdotes un importante consejo para el Sacramento de la Reconciliación y les pidió no comportarse como "delincuentes".
Así lo dijo el Papa en un discurso improvisado que pronunció en forma espontánea el 10 de noviembre al reunirse con los participantes de un Curso organizado por el Dicasterio para el Clero dirigido a los rectores y formadores de Seminarios de América Latina, procedentes de casi todos los países del Continente y del Caribe.
Una vez más, el Santo Padre decidió entregar por escrito su discurso preparado para "que lo lean con tranquilidad" y explicó "me voy a permitir decir tres o cuatro cosas que tengo en el corazón, que se las quiero decir de cercano, para la vida sacerdotal de ustedes, sobre todo, la vida de formadores del seminario".
De este modo, el Papa abordó diferentes temas. Uno de ellos, fue el modo de administrar el Sacramento de la Confesión y en forma coloquial reconoció "a veces, sufro cuando encuentro gente que viene llorando porque fue a confesarse y le dijeron de todo".
"Si vos te venís a confesar porque hiciste una, dos, diez mil macanas… ¡das gracias a Dios y lo perdonás! Pero todavía que el otro pasa vergüenza y todo, le dás, le dás y le dás", señaló el Papa.
Luego, el Santo Padre continuó con un ejemplo de diálogo en el que el sacerdote le dice al penitente que "no puedo absolverte, no puedo porque estás en pecado mortal, tengo que pedir permiso al obispo".