Escoger un nombre bíblico es un buen recurso para acercar a los niños a la fe. Muchos de estos nombres tienen significados que los relacionan con aspectos relevantes de la fe cristiana.
Estos son algunos de ellos:
Gabriel
El nombre "Gabriel" es de origen hebreo y significa "fortaleza de Dios". Es mencionado en el Nuevo Testamento como el Ángel de Dios encargado de anunciar a la Santísima Virgen María que daría a luz al Hijo de Dios.
Daniel
Significa "Dios es mi juez". Fue uno de los más importantes profetas del Antiguo Testamento y es recordado por haber sido encerrado en un pozo con leones y haber salido con vida gracias a la ayuda de Dios.