MADRID,
El Instituto de Política Familiar (IPF) de Cataluña retó a la sociedad a una “consulta popular vinculante” que demuestre que existe una voluntad por parte del pueblo de cerrar las puertas al proyecto de ley de la Generalitat catalana que legalizaría la adopción de menores por parte de parejas homosexuales.
El presidente del IPF, Liberto Senderos, después de felicitar a la Conferencia Episcopal Tarraconense por su valentía en la defensa de los derechos de los niños a tener un padre y una madre, llamó a "las otras confesiones religiosas, así como a toda la sociedad civil, a manifestar públicamente el rechazo hacia el edicto que tramita la Generalidad y que quiere dar niños a las parejas homosexuales”.
Ante el valiente comunicado hecho por los obispos tarraconenses, Senderos señaló que, efectivamente, “hace falta ser claros en la defensa de los más desvalidos de la sociedad, que son los niños”.
Senderos manifestó que esperaba que las alegaciones que recibirá el anteproyecto, -una, anunció, sería del IPF en Cataluña-, hagan olvidar al gobierno una medida tan impopular.
“No puede ser que a los que se quejan por la falta de sensibilidad de la Generalitat hacia un colectivo tan maltratado por la suerte, como son los niños a ser adoptados, se nos insulte y ridiculice, y lo peor bajo falsas acusaciones de intolerancia y homofobia, y por parte de colectivos más pequeños pero muy ruidosos”, señaló el IPF en una nota.
Por último, el IPF en Cataluña apeló al talante dinámico y solidario de los catalanes con los más necesitados para hacer frente a la medida del gobierno que "podría representar un enrarecimiento importante en la consideración que tanto necesita la familia”.