VATICANO,
El Papa Francisco se reunió esta mañana en el Vaticano con peregrinos de El Salvador, que han llegado hasta Roma para agradecer la beatificación de los mártires Rutilio Grande García, Cosme Spessotto, Manuel Solórzano y Nelson Rutilio Lemus, beatificados el pasado 23 de enero.
Los cuatro fueron asesinados entre 1976 y 1980 por paramilitares presuntamente vinculados al gobierno salvadoreño.
Los peregrinos acudieron junto a Mons. José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador, a quien el Papa Francisco agradeció el haber organizado esta peregrinación a la tumba de San Pedro.
En su discurso dirigido a los salvadoreños, el Papa explicó que los mártires "son un don gratuito del Señor, como afirmaba el beato Cosme Spessotto, el más precioso don que Dios puede dar a su Iglesia, pues en ellos se actualiza ese amor más grande que Jesús nos mostró en la Cruz".
A continuación, aseguró que fue Dios "quien los convocó a este combate, quien les dio la fuerza para alcanzar la victoria, y quien nos los presenta ahora para nuestra edificación".
"Ellos son un regalo inmenso, tanto para la Iglesia que peregrina en El Salvador, como para la Iglesia universal, y su significado quedará siempre en el misterio de Dios", defendió el Santo Padre.